Si quieres conocer la comunidad gallega siguiendo los pasos de Emilia Pardo Bazán, no te pierdas la ruta que te proponemos.
29 ene 2020 . Actualizado a las 13:51 h.Una de nuestras escritoras más prolíficas, importantes e internacionales es Emilia Pardo Bazán. Prosista, articulista, cronista y viajera, su obra es inmensa y en ella la tierra gallega, sus gentes y sus leyendas siempre tienen un hueco excepcional.
Si quieres conocer esta comunidad al tiempo que descubres la vida de esta literata coruñesa, te proponemos una ruta por la Galicia de Emilia Pardo Bazán que no te dejará indiferente.
A Coruña
Comenzamos este recorrido en la Ciudad Vieja de A Coruña, en la que vivían las clases altas y se sucedían las casonas hidalgas, allá por por los siglos XVIII y XIX. No dejes de callejear por el casco antiguo, acercarte hasta el Jardín de San Carlos y visitar el castillo de San Antón. Pero en esta particular ruta, la primera parada es obligada: la casa familiar de Emilia Pardo Bazán, en el número 11 de la calle Tabernas.
La escritora nació en septiembre de 1851 en una vivienda hoy desaparecida, que se encontraba en el solar del número 3 de la Rúa Rego de Auga. Pero poco después el padre adquirió el dieciochesco edificio blasonado de la calle Tabernas y la familia se mudó. Doña Emilia pasó aquí su infancia y su juventud, y una vez casada continúo siendo una de sus viviendas. De hecho, en ella nacieron sus hijos y se celebraba una tertulia semanal durante sus estancias en la ciudad.
La Casa Museo de Emilia Pardo Bazán, que también acoge la sede de la Real Academia Galega, abre sus puertas de lunes a jueves de 09:00 a 14:45 horas y de 16:30 a 19:45 horas, así como viernes solo de mañanas, en horario de invierno. Entre el 1 de julio y el 31 de agosto, abre de 09:00 a 14:30 horas de lunes a viernes.
Si dejas atrás la Ciudad Vieja y avanzas por el paseo marítimo hacia los Jardines de Méndez Núñez, en tu recorrido por A Coruña, ciudad a la que la autora denominaba Marineda, encontrarás el monumento a Emilia Pardo Bazán. Se trata de una hermosa escultura sedente en su honor que fue inaugurada en 1916, año en que el rey Alfonso XIII la nombró «catedrático numerario de Literatura contemporánea de las Lenguas neo-latinas de la Universidad Central».
Sada
En la parroquia de Meirás, en el Concello de Sada, se localiza el Pazo de Meirás, a 20 minutos del centro de la ciudad de A Coruña. Se trata de un edificio levantado sobre las ruinas de una antigua fortificación medieval, destruida durante la Guerra de la Independencia. La construcción actual es de finales del siglo XIX.
En esa época, pasó a manos de doña Emilia que fue quien ordenó reconstruirla. A una de las torres la bautizó como «Torre de la quimera» y hacía referencia a uno de los balcones como el «balcón de las musas». La escritora residía aquí algunos meses al año.
Oleiros
Si sigues hacia el vecino ayuntamiento de Oleiros, podrás visitar uno de los castillos más bonitos de Galicia, también vinculado con doña Emilia: el castillo de Santa Cruz. Este baluarte defensivo del siglo XVII fue abandonado en la siguiente centuria, y durante el siglo XIX lo adquirió en subasta pública José Quiroga y Pérez de Deza, marido de Emilia Pardo Bazán, con quien se había casado a los 17 años. El edificio fue recuperado y restaurado y lo utilizaron como residencia de verano.
En la actualidad, el castillo de Santa Cruz es sede del Centro de Extensión Universitaria e Divulgación Ambiental de Galicia (CEIDA) y puede visitarse por completo.
O Carballiño
Siguiendo los pasos de Emilia Pardo Bazán por Galicia, es necesario detenerse en una localidad en la provincia de Ourense: O Carballiño. Y es que en la Plaza Mayor, en pleno casco histórico, se encuentra la fachada del edificio de los Quiroga, la casa familiar de su marido. En ella luce una placa que conmemora la relación de la escritora gallega con esta tierra, ya que la convirtió en escenario de El Cisne de Vilamorta, una de sus novelas de más éxito.
Entre las otras propiedades de su familia política, también se encontraba el Pazo de Corneda en Irixo, el Pazo de Cimadevila en San Xoán de Cabanelas y el Pazo de Banga. Precisamente en este último el matrimonio pasaba algunas temporadas, como durante la vendimia o las fiestas. Doña Emilia lo llamaba el «balcón do Ribeiro». Cuando se separaron en 1883, Quiroga se instaló en O Carballiño.
Pontevedra
Otros de los lugares a los que acudía con asiduidad Emilia Pardo Bazán eran los balnearios, siendo uno de sus preferidos el balneario de Mondariz, en la provincia de Pontevedra. De hecho, en su Álbum de Honor, todavía se conserva la firma que dejó escrita cuando acudió a él por vez primera en septiembre de 1887.
Pero doña Emilia también iba a tomar las aguas al balneario de la isla de A Toxa y la residencia de verano de sus padres era el Pazo de Miraflores en Sanxenxo, al que también acudió con frecuencia.
Además, en el centro de la ciudad de Pontevedra puedes acercarte hasta la plaza de A Peregrina y saludar a la figura del loro Ravachol, frente a donde estaba la botica en la que se encontraba este famoso animal y donde se sucedían las tertulias de intelectuales y escritores. Doña Emilia también asistió y se cuenta que el loro le dedicaba adjetivos poco agradables.
Por último, si te preguntas dónde presentar tus respetos a los restos de Emilia Pardo Bazán, tendrás que ir a Madrid, lugar en el que falleció en 1921, pues yace en la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción.
En su ciudad natal, tras su fallecimiento, el pleno del Concello de A Coruña acordó inscribir en letras de oro en el lucernario del salón de sesiones el nombre de doña Emilia, así como el de Concepción Arenal y Rosalía de Castro. También se dispuso colocar la placa conmemorativa en honor de la escritora en la fachada de la casa de la calle Tabernas.