Las navieras ofrecen viajes alternativos sin pisar las islas
01 ago 2021 . Actualizado a las 21:06 h.En un contexto de pandemia, y cuando aún es necesaria la precaución para frenar el virus, el turismo en entornos naturales está teniendo más tirón que nunca. Así lo demuestra la extraordinaria demanda de la población para visitar las islas Cíes. Con un aforo de 1.800 visitantes por día, se han agotado las autorizaciones que concede la Xunta para acceder al archipiélago las próximas tres semanas. Ya solo quedan plazas a partir de día 26 (había 208 al cierre de esta edición), a expensas de anulaciones puntuales que puedan producirse.
Para poder visitar las islas, es necesario retirar previamente la autorización correspondiente en la central de reservas de la Xunta, tanto para desembarcar como para adquirir el billete de barco. Quien no disponga de embarcación particular deberá trasladarse a las Cíes en los barcos puestos a disposición por las navieras Mar de Ons y Nabia. Ambas empresas ofrecen varias opciones para la ida y vuelta, por lo que no hay que preocuparse por quedarse sin asiento. Ante la falta de cupo, las navieras ofrecen alternativas como las experiencias nocturnas Starlight. Sin bajar del barco, los tripulantes podrán disfrutar de la observación privilegiada de las estrellas de la que gozan las islas. No obstante, la capacidad para campistas se resiste. El aforo autorizado por el Gobierno autonómico para acampar, de 600 personas, no se ha agotado ni un solo día, permitiendo aún la cabida de entre 50 y 100 personas en las fechas más copadas. Pero ojo, la capacidad del cámping situado en la Illa do Faro -el único del archipiélago- se rige por criterios diferentes. Dependiendo del número de personas por reserva y del número de tiendas, el cupo disponible varía. Durante los fines de semana de mediados de agosto, las islas han agotado por completo su capacidad.
El entorno de las Cíes también se está beneficiando del tirón. Según datos de la compañía de alquiler vacacional Airbnb, la demanda de alojamientos temporales en las proximidades ha aumentado un 35 % respecto al 2019. Lo están notando municipios como Vigo, Cangas y Baiona.