Este sendero de A Pobra que sigue el cauce fluvial ofrece espectaculares imágenes
02 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Una de las actividades del colectivo Camiñadas do Barbanza es la organización de rutas y, siguiendo sus pasos, pueden encontrarse recorridos tan hermosos como el del río Lérez, en A Pobra do Caramiñal, que arranca en punta de Crocha y, siguiendo por Batán, Rego de Horta, Croa de Posmarcos, Pumadiño y Petón do Covo llega hasta el puente de As Taras, construido a finales de 1800.
Con solo tres kilómetros de longitud y un trazado que permite completarlo tanto a niños como a personas mayores, constituye toda una experiencia que aúna naturaleza e historia. Aunque últimamente son bastantes las personas que se acercan hasta el puente de As Taras, la ruta es poco conocida, lo que permite conservar su esencia.
Quien conoce cada palmo del terreno es Suso Dieste, que junto a Pepe Moure, se encarga periódicamente de limpiar y señalizar el recorrido. Hacen las marcas con cintas y flechas para dejar la menor huella posible, por lo que con el paso del tiempo van borrándose. Otro integrante de Camiñadas do Barbanza, José Luis Figueroa, se ocupa de difundir sus actividades.
Resalta Dieste la singularidad que ofrece el cauce del río, ya que combina zonas muy tranquilas con otras agrestes. Está jalonado de multitud de pozas en las que poder darse un refrescante baño y el caminante también puede encontrarse con pequeños embalses en los que, explica, antiguamente, los vecinos cogían agua para los molinos.
Varios puentes
Además de edificaciones, a lo largo del recorrido hay puentes de piedra. Así sucede en Batán, donde quedan un par. El más antiguo carece de barandilla y sobre la calzada se echó cemento en el pasado. Sin embargo, es perfectamente transitable.
Este sorprendente trayecto por un paisaje de espectaculares imágenes, acaba en un flamante puente, el de As Taras, con una amplia plataforma.