Contemplar la provincia con perspectiva es posible desde estos parajes naturales
07 ago 2021 . Actualizado a las 18:59 h.Lugo cuenta con lugares privilegiados desde los que observar panorámicas propias de un cuadro. Estos miradores se encuentran repartidos por toda la provincia y permiten contemplar tanto enclaves que forman parte del patrimonio natural como también los tesoros arquitectónicos con los que cuenta la comunidad.
En Friol se encuentra el Mirador da Serra da Cova da Serpe desde el que se puede observar, a una altura de 800 metros, la sierra montañosa del mismo nombre situada entre las provincia de Lugo y A Coruña. Por el lugar, que forma parte de la Reserva de la Biosfera Terras do Miño y es escenario de una conocida leyenda sobre amores prohibidos, discurre una ruta perfecta para amantes del senderismo.
A Mariña también cuenta con puntos que son de parada obligatoria para disfrutar de la belleza del paisaje de la costa. Uno de ellos es el mirador de San Roque situado en Viveiro. A 353 metros sobre el nivel del mar, este enclave, uno de los más valorados por los vecinos de la zona, ofrece unas espectaculares vistas de la ría, de los puertos de Viveiro y Celeiro y de la playa de Covas. Es de fácil acceso y el recorrido puede hacerse a pie. Además, en la cima, también se encuentra un área recreativa y próxima a ella está la Capilla de San Roque —que le da nombre al monte— y la Cueva del Santo, coronada por una cruz.
Senderismo e historia
La torre de Doncos es uno de los elementos más emblemáticos de Os Ancares. Aunque no es posible la visita al interior, se puede disfrutar de los restos de la torre medieval y de una vista privilegiada del valle del río Navia desde una pasarela metálica que funciona a modo de mirador. En las inmediaciones también hay varios senderos que permiten admirar el paisaje y conocer la zona. Destaca la Ruta del Castillo de unos 4 quilómetros, que se inicia en el pueblo y que, tras pasar por un elemento de gran valor etnográfico como es el Muiño da Veiga, conduce a la torre.
A lo largo del cañón del Sil se extiende una amplia red de miradores desde los que se pueden contemplar los espectaculares parajes de la Ribeira Sacra. Uno de los más singulares es el de Pena do Castelo, en Doade, parroquia de Sober. A más de 400 metros sobre el nivel del río, se alza este espacio que tiene un encanto especial, en parte gracias a su historia, pues está situado sobre un antiguo asentamiento castrexo. Tras una subida, se accede al mirador, situado al lado de una capilla en honor a San Amaro y desde donde se puede disfrutar de unas impresionantes vistas de los cañones que separan las provincias de Lugo y Ourense.
Paisaje fluvial
En el concello de Pantón está la Fervenza de Augacaída, una de las cascadas más bonitas de toda la provincia que se puede apreciar desde una pasarela de madera. Se llega a ella a través de un sendero de menos de dos kilómetros que, a pesar de que en algunos tramos se vuelve resbaladizo y presenta algún que otro desnivel por lo que conviene extremar las precauciones, merece la pena. También puedes desviarte del camino principal y acercarte hasta Castro de Marce, otro mirador, en este caso natural, cuya altura permite gozar de una panorámica del río Miño.