Estos lugares son la excusa perfecta para recorrer muchas de las rutas naturales de la provincia
28 ago 2021 . Actualizado a las 10:26 h.La temporada estival es perfecta para los amantes del senderismo. La provincia de Lugo cuenta con numerosas rutas naturales, con diferentes longitudes y grados de dificultad, que en sus tramos finales esconden cascadas de gran belleza. Estas caminatas son ideales para realizar tanto en familia como en solitario, a la vez que permiten compaginar el deporte con la visita a estas maravillas de la naturaleza.
En plena Ribeira Sacra lucense, en el municipio de Pantón, se alza la Fervenza de Augacaída, de 40 metros de altura, una de las cascadas gallegas de mayor belleza, junto con la Fervenza da Toxa (Silleda), considerada la más alta de Galicia en caída libre y una de las más espectaculares de España. La ruta para acceder a esta catarata, situada en el cauce del Rego de Aguianza, es de apenas 2 kilómetros, que transcurren entre carballos, castaños y otras especies autóctonas. La cascada, oculta por el bosque, es imposible de observar hasta el momento justo en el uno se sitúa frente a ella. En esta ruta también está ubicado el Castro de Marce, un mirador sobre el río Miño.
También al sur de la provincia, en una zona próxima a la aldea de Vieiros, en el municipio de Quiroga, el río Selmo se despeña desde unos 34 metros de altura formando la Fervenza de Vieiros. La ruta de senderismo que permite el acceso a esta cascada es circular, de poco más de un kilómetro de longitud y de baja dificultad, y permite visualizar el salto de agua desde varios puntos de vista a lo largo de todo su recorrido. Durante el camino es posible disfrutar de la belleza de la naturaleza de O Courel, además de la de la propia aldea de Vieiros. Esta ruta, una de las más emblemáticas de la sierra, está repleta de numerosos rápidos y cataratas.
Más hacia el norte de Lugo, a tan solo seis kilómetros del casco urbano de A Fonsagrada se encuentra la Seimeira de Vilagocende, una cascada de 54 metros de altura. El río da Porteliña se desliza desde lo alto para fluir entre un bosque de robles, abedules y alisos. La distancia entre el inicio de esta sencilla ruta y la cascada es de 800 metros, aproximadamente. Los puentes y escaleras habilitados a lo largo del camino, así como los bancos y merenderos, convierten este paraje natural en un lugar idóneo para disfrutar de un día en familia.
No muy lejos de esta catarata, en la aldea de San Paio, en el municipio de Baleira, se encuentra la Fervenza do Pozo da Ferreira, situada en el Rego de Cubilledo, afluente del río Eo. Esta cascada forma parte de la ruta da Marronda, un sendero circular de 21,3 kilómetros que atraviesa las parroquias de A Braña, Martín y Cubilledo. A lo largo de esta ruta fluvial es posible disfrutar de la Fraga da Marronda, un bosque autóctono de gran valor ecológico, y de otro salto de agua, el de Acea da Serra.
En la costa lucense, en la Serra do Xistral, se alza una cascada de más de 80 metros de caída con un fondo de roca granítica, la Fervenza Escouridal. Situada entre O Pereiro (Alfoz) y O Cadramón (O Valadouro), esta catarata, una de las más impresionantes de A Mariña, cuenta con escaleras de madera, pasamanos y cuerdas que convierten el descenso en una actividad más segura. A través de esta misma ruta es posible llegar hasta el Cruceiro da Caxigueira, una construcción que data del siglo XVIII.