QueresVela? propone rutas en barco para ver la puesta de sol en el cabo Ortegal, en Cariño

Este año, Álvaro Carrodeguas (Feás-Cariño, 1972) no ha parado de navegar. En Semana Santa inició las rutas por la ría de Ortigueira, que siguieron los fines de semana de buen tiempo y se intensificaron desde principios de julio. Y en las últimas semanas, con el sol esquivo pero buena mar, las travesías han sido diarias. Esta aventura empresarial echó a andar en el año 2015, con el proyecto QueresVela?, un juego de palabras que esconde una doble propuesta: navegar en el velero Sanjola y descubrir la ría ortegana y el cabo Ortegal, destino de muchas de sus rutas, ahora también vespertinas. «Ás veces saio pola tarde, para ver a posta de sol nos Aguillóns, é espectacular», comenta.

Desde que se declaró la pandemia, entre sus clientes apenas hay extranjeros. «Veñen moi poucos, pero hai máis xente da zona e turismo nacional, de Zaragoza, Alicante...», explica. Las expediciones parten del muelle de Ortigueira, cuando el destino es la ría, o del puerto de Cariño, si el objetivo es alcanzar el cabo Ortegal. Si alguien lo demanda, sale de Espasante. Casi todas duran en torno a dos horas y media. A la embarcación pueden subirse un máximo de cinco personas y el precio es de 45 euros por pasajero si únicamente van dos (algo habitual en el caso de parejas que prefieren una ruta «exclusiva»), o 40 si se suman más personas. Los niños pagan 15 euros.

A bordo, en ocasiones, salta la sorpresa, como un abadejo prendido de un anzuelo. «Ás veces coincídenos ver cetáceos, sobre todo delfíns. De momento, as orcas non andan por aí, pero o ano pasado si que as vin», cuenta. Quien quiera seguir las peripecias del Sanjola puede hacerlo a través del canal de YouTube, operativo desde principios de agosto. Aunque lo mejor es subirse, como hicieron unos chavales asturianos que viajan en autocaravana: «Tiñan moitísima ilusión por navegar e foron encantados».

Álvaro ha heredado el amor por el mar de su padre, que era marinero, y su abuelo, que trabajaba en las lanchas de pasaje que atravesaban la ría, de Feás (Cariño) a Ortigueira. El mar se convirtió hace tiempo en su casa. Vive, durante la mayor parte del año, en el velero, donde también pasó el confinamiento. Atracado en el puerto de Ortigueira, aprovechó el tiempo muerto para «rascar e limpar» el Sanjola, un barco sueco de aluminio y 8,80 metros de eslora. En la web queresvela.com, el correo info@queresvela.com o el 636 887 853 se puede reservar una excursión.

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