De Roma a Santiago: Pichi y sus pedaladas solidarias vuelven al Camino

Dicen que hacer el Camino de Santiago transforma a la persona. Que el viaje es, además de un transitar por paisajes diversos, un recorrido por nuestro mundo interior. Que la experiencia cambia a quien sabe sacarle partido. Juan Francisco Prieto confirma todas esas impresiones. Habla con conocimiento de causa: en el mes de abril recorrió los siete Caminos que, con meta en Compostela, recorren Galicia. Lo hizo por varias razones, entre ellas recaudar fondos para Cáritas. Y esa sensación de estar dando pedaladas de solidaridad se le ha metido en el pecho. «Mira que he hecho muchas rutas, hasta estuve en Chile, en la carretera Austral... Y ni siquiera allí había sentido una emoción tan especial. Que tu esfuerzo pueda servir para ayudar a otras personas es algo muy grande», cuenta este grovense.

Aquella experiencia jacobea multiplicada por siete fue la alternativa que Juan Francisco Prieto, Pichi, encontró cuando por culpa del covid-19 naufragó su plan inicial: hacer el Camino entre Roma y Santiago a pedalada limpia, convirtiendo cada uno de esos golpes de piernas en aportaciones solidarias. «Era mi idea original pero la tuve que aparcar por las restricciones que había». Ahora, con el fin de la pandemia a la vuelta de la esquina, Pichi ha decidido retomar su proyecto original. El domingo viajará a Roma y el martes de la próxima se subirá en su bicicleta y comenzará a recorrer los 2.600 kilómetros que lo separarán de Santiago. De nuevo serán las suyas pedaladas solidarias, ya que su intención es recaudar fondos para ayudar a la asociación Anduriña, una entidad empeñada en mejorar la calidad de vida de las personas de O Salnés que tienen algún tipo de discapacidad. Se podrá colaborar «apadrinando un kilómetro» del recorrido bien a través de migranodearena.com o de la cuenta de Anduriña en Abanca. «Decidí habilitar esta segunda forma de participación porque hay gente mayor que no se maneja muy bien con Internet y que también quería participar y no pudo hacerlo la vez anterior», explica Pichi.

Habla mientras lo prepara todo para el viaje que tiene por delante. Saldrá de Roma y pondrá rumbo al norte de Italia siguiendo la Vía Francígena, el camino que seguían los peregrinos que iban a la Ciudad Eterna desde Inglaterra; luego atravesará Francia por la Costa Azul y la Vía Aurelia. Entrará en España por Gerona y hará parada en el monasterio de Montserrat. Acabará por enlazar con el Camino Francés en Puente la Reina.

Calcula Pichi que ese recorrido, que no finalizará hasta haber alcanzado la Praza do Obradoiro, le llevará alrededor de treinta días. Habrá momentos duros -cansancio, lesiones, mal tiempo...- pero habrá, sobre todo, muchos momentos especiales. De esos que reconfortan el alma y hacen que todo el esfuerzo merezca la pena.

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