Dámaso Expósito lidera un proyecto formado por varias empresas, que inaugurarán este sábado el Hotel Mercure, en el que la gastronomía gallega de su restaurante se une a la exclusividad de sus habitaciones de diseño
03 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El emprendimiento local dio esta semana una nueva alegría a todos los vecinos de Lugo. Y es que Dámaso Expósito, empresario lucense y gerente de la compañía Óktonal, abrió las puertas del Mercure Lugo Centro, el nuevo hotel de la ciudad amurallada. Constará de dos partes diferenciadas, una dedicada a la cocina y al disfrute gastronómico y una reservada para el descanso y el alojamiento de visitantes.
El hotel se ubica en la Rúa Marina Española, junto a la Avenida Ramón Ferreiro. Su apertura llega 4 años después de la adquisición del edificio por parte de Accor Hotels, la empresa matriz de Mercure, que rehabilitó el antiguo edificio de la residencia estudiantil de la Compañía de María, que ahora será uno de los complejos hoteleros más modernos de la ciudad. Compraron el edificio hace casi un lustro, pero retrasos en la concesión de licencias (recibieron la última este pasado miércoles), en las obras de reforma y en la adaptación del establecimiento provocaron que el estreno se postergase hasta esta semana. De hecho, hasta mañana, solo está abierta la planta baja del edificio, la zona de restauración, mientras que no se aceptarán reservas hoteleras hasta este sábado.
Dámaso Expósito, principal responsable del proyecto, explica que «el complejo está diseñado para ser transversal, tanto en el perfil de los clientes como en las experiencias y eventos que se puedan llevar a cabo».
Todavía quedan detalles por pulir. Los operarios siguen trabajando a contrarreloj para terminar una gran sala de fiestas, ubicada más allá del comedor principal del restaurante. Allí, podrán acoger desde bodas hasta convites, ya que el espacio es amplísimo y conecta con la terraza, una de las partes más llamativas de todo el hotel. «En verano será uno de los lugares más transitados del hotel», dice Expósito.
Una inversión millonaria
Lo cierto es que la apuesta de todas las compañías implicadas es, desde luego, decidida. Más de 10 millones de euros forman el presupuesto de la compra, reforma y mantenimiento del complejo, que apuró los plazos para abrir este diciembre «y aprovechar una época navideña sobre la que tenemos puesta mucha ilusión», explica el gerente.
En el aspecto gastronómico, el restaurante, llamado Brasas Brancas, utiliza producto local, como «carne de vaca de una explotación muy prestigiosa de Monforte», y se especializa en la «nueva cocina gallega».
El hotel, por su parte, cuenta con 89 habitaciones para hasta 178 huéspedes. Las cuatro estrellas que lo avalan dan pistas sobre la calidad de las estancias, diseñadas por una profesional madrileña especializada. Hay 5 tipos de habitaciones diferentes, siendo las más exclusivas unas suites que cuentan con amplias terrazas, vestidor o recibidor.
El Alberto .2, un restaurante que aúna tradición y vanguardia en su cocina
También en el sector hostelero, uno de los restaurantes con mayor tradición del casco histórico de Lugo regresa totalmente renovado. Aunque, como dice el responsable del negocio, Alberto García, «no es que el restaurante que cerró en enero vuelva a abrir ahora. Esto es algo totalmente nuevo, y lo estrenamos con ganas de demostrárselo a todos los lucenses».
Y es que el Alberto .2, regentado por los hermanos García, Alberto y Koki, apostará, como el Hotel Mercure, por «productos de proximidad», que usarán para «ofrecer un menú 100 % nueva cocina gallega.
En su carta, se pueden pedir productos como pulpo de la ría, grelos de Vilalba, merluza do pincho, fabas da Lourenzá o queso de O Cebreiro, entre otros muchos productos que se dividen en entrantes, menú degustación, «para picar» y según su origen, entre otros.
El nuevo restaurante de la Rúa da Cruz de Lugo unirá la vanguardia con la tradición, ya que Alberto y Koki se criaron viendo como su padre regentó su restaurante en ese mismo edificio hasta hace apenas dos años. «Conocemos el local desde que tenemos uso de razón, así que siempre tuvimos claro que queríamos comprarlo y montar nuestro propio restaurante», explica Alberto García.
Salones privados
Finalmente, la oportunidad surgió hace apenas tres meses. Desde entonces, todo han sido preparativos para que la apertura pudiese llegar antes del período navideño, con vistas a albergar cenas y comidas de empresa y eventos de Navidad y Fin de Año.
Contará con una moderna tapería en la planta baja, con un restaurante al uso en la primera y en la segunda planta, y con zonas de servicio en el tercer piso. Incluso, tendrá arriba de todo varios pequeños salones privados, en los que clientes «especiales» podrán celebrar comidas o reuniones sin ser molestados por el ruido y el trasiego típicos de un restaurante.
Este no es el único proyecto en el que están embarcados estos dos emprendedores. Alberto y Koki García cuentan también con la empresa de cátering Eventos Alberto .2. Según Alberto, esta compañía «va muy bien», y ya tienen trabajos reservados por toda Galicia.