El Nacimiento elaborado por los vecinos abrió ayer sus puertas; durante cinco semanas recibirá miles de visitas
05 dic 2021 . Actualizado a las 22:45 h.Algo tiene el belén de Valga de milagro navideño. Quizás sea que nació de la voluntad de los vecinos y vecinas. Ocurrió hace casi treinta años, y el espíritu que alumbró las primeras composiciones no ha hecho más que crecer y crecer. También el Nacimiento, que quedó inaugurado en la lluviosa tarde de este domingo. A las cinco y media, tras ser bendecido por el cura, el belén comenzó a recibir visitas: seguirá haciéndolo durante buena parte del año, porque se ha convertido en un reclamo más para los turistas.
Razones hay que explican su éxito. Por una parte, todas las figuras —y son cuatro mil— han sido elaboradas a mano por la gente de la asociación Amigos del belén. Papel, alambre y telas son los materiales que emplean para modelar unos muñecos en los que, a poco que nos fijemos, no nos costará descubrir rasgos conocidos. Y es que esa es otra de las características de este Nacimiento, que se convierte en una suerte de crónica del año y, como tal, expone ante el público los acontecimientos y protagonistas que han marcado este 2021 en Valga y en el mundo.
Obviamente, como ya ocurrió el año pasado, las referencias a la pandemia no podían faltar. Ahí está una réplica en miniatura del vacunómetro de la Cidade da Cultura. Ahí están, también, los Juegos Olímpicos de Tokio, que toman el cuerpo de campeonas como Ana Peleteiro o Teresa Portela. El fútbol no falla nunca, y en esta ocasión aparece representado por los integrantes de la selección española andando en patinete y por las despedidas de Messi y Sergio Ramos del Barcelona y del Real Madrid, respectivamente.
Aunque en los últimos días haya quedado un poco fuera del foco mediático, en Valga no se han olvidado de la isla de La Palma, que sigue sujeta a las convulsiones del volcán Cumbre Vieja. En el paisaje que han creado se ve la iglesia de Todoque, arrasada por la erupción. Por cierto: el próximo domingo se organizará una tómbola a beneficio de los damnificados por este estremecedor estallido de la naturaleza.
De entrada, el belén estará abierto al público durante las cinco próximas semanas y de forma gratuita. Los horarios serán, de lunes a viernes, de 17.30 a 20.30 horas. Los sábados, de 17 a 20.30 horas y los domingos, además, de 12 a 14 horas. Una vez que pase el mogollón festivo, las visitas se mantendrán como en años anteriores, pero para grupos organizados y previa concertación de cita con los organizadores de este sueño de Navidad.