El Pescanova Biomarine Center permite a los visitantes sumergirse en el mundo de la acuicultura y de los ecosistemas marinos, descubriendo el trabajo de investigación y las especies que se cultivan
26 dic 2021 . Actualizado a las 04:45 h.Nueva Pescanova inauguró en O Grove, el pasado mes de noviembre, el primer centro privado de investigación en acuicultura de España. El complejo posiciona al grupo empresarial a la vanguardia mundial de una actividad, que, según la FAO, ya supone el 50 % del consumo de pescado en todo el planeta. Entre sus instalaciones, de 4.000 metros de superficie, el Pescanova Biomarine Center ha abierto al público un museo único en todo el sur de Europa, el primer centro expositivo para divulgar la acuicultura y concienciar acerca de la importancia del cuidado de los ecosistemas marinos para el futuro del desarrollo del planeta.
El recorrido comienza mostrando al visitante la propia historia del grupo, desde la construcción del primer buque congelador del mundo en el año 1960, del que se exhibe una maqueta, hasta otros hitos como el nacimiento del célebre Rodolfo Langostino. A través de experiencias virtuales se ofrece abundante información sobre la actividad de Nueva Pescanova: la pesca, el cultivo, la elaboración y la comercialización de los productos del mar.
Una visita virtual a los barcos más modernos de Nueva Pescanova permite conocer sus características y los distintos métodos de pesca, así como contactar con sus tripulaciones o descubrir cómo se garantiza la sostenibilidad en estos buques. Además, los asistentes atravesarán una recreación de la zona costera de la ría de Arousa que da paso al área dedicada a «El futuro del mar».
Esta sección reúne un conjunto de paneles y elementos divulgativos que ayudan a conocer y entender la importancia de los ecosistemas marinos para la vida de la tierra, los problemas de los mares y océanos y los retos de futuro para cuidarlos entre todos. El elemento central de esta zona es la espectacular ecoesfera: un sistema cerrado y autosuficiente inventado por la NASA.
Otro apartado del museo que se caracteriza por su contenido divulgativo es «Cultivando el mar». Tiene por objeto descubrir al visitante, mediante murales gráficos que mezclan ilustración con animación, los beneficios de la acuicultura, las claves para garantizar una práctica acuícola responsable y sostenible, así como los principales hitos de los más de 5.000 años de historia con que cuenta esta actividad en el mundo. Quizás más de uno se sorprenda al descubrir que la acuicultura comenzó en China más de 3.000 años antes de Cristo o que, de las 250.000 especies que viven en los ecosistemas acuáticos, tan solo se cultivan en la actualidad 580. De hecho, el centro cuenta con un acuario interactivo que permite consultar cuáles son esas especies e incluso lanzarlas al agua desde el puesto de control.
El museo del Pescanova Biomarine Center dispone también de una sala dedicada expresamente al I+D+i. De la mano de uno de los investigadores del grupo, el visitante puede adentrarse en un laboratorio submarino, en el que tendrá la oportunidad de conocer las diferentes tecnologías empleadas en acuicultura, cómo funcionan los hidrófonos o micrófonos de mar seleccionando las especies que quiere escuchar, cómo medir parámetros como el oxígeno, la temperatura y el pH del agua a través de diferentes sensores, o incluso conocer cómo funciona un dron acuático. La inteligencia artificial y el big data aplicados a este sector pionero.
El recorrido por las instalaciones concluye con una experiencia de realidad virtual en 360 grados que permitirá conocer el propio centro de investigación de O Grove, el trabajo que en él se desarrolla, y también ver nadar a los pulpos y los rodaballos que se crían en la planta.
Su reciente puesta en marcha ha convertido ya al Pescanova Biomarine Center en un centro de referencia en el cultivo de nuevas especies. En él trabajan más de 40 investigadores que ya lograron el hito mundial al cerrar, por primera vez en la historia, el ciclo de reproducción del pulpo en acuicultura, consiguiendo que no solo los ejemplares nacidos en Nueva Pescanova hayan llegado a su edad adulta, sino que hayan podido reproducirse fuera de su hábitat natural. A día de hoy trabajan con la quinta generación de pulpos. Lourditas, el primer pulpo nacido en acuicultura (llamado así en broma por lo que tenía de milagro), fue creciendo, se convirtió en madre y ya tiene tataranietos que acaban de ser padres. No es de extrañar, por ello, que se le haya hecho un hueco en el museo.
Visitas
Para visitar el museo Pescanova Biomarine Center, existen varias modalidades. La libre incluye acceso a todos los recursos expositivos e interactivos sin limitación de tiempo. La guiada individual, además del acceso libre, facilita una explicación por parte de un profesional de todo cuando se ve durante un recorrido de aproximadamente una hora. Existe también la opción de realizar esta misma visita para grupos de entre 9 y 20 personas o para grupos escolares.
El Pescanova Biomarine Center cuenta, además, con una sala de congresos, un espacio polivalente dotado de equipamiento para la celebración de presentaciones o encuentros corporativos. También dispone de un espacio gastronómico para showcookings, catas, actividades de team building o presentaciones de productos, con una cocina y dispositivos para grabación cenital y retransmisión en streaming y pantallas audiovisuales.