Machine Head y Amon Amarth inaugurarán en octubre el Resurrection Day
08 ene 2022 . Actualizado a las 22:36 h.El Resurrection Fest, el festival de rock duro que desde el 2006 ha transformado Viveiro en un referente europeo del género, tendrá en A Coruña una derivada otoñal. Se llamará Resurrection Day y lo inaugurarán el próximo 8 de octubre, a las 18.30 horas, en el Coliseum, los estadounidenses Machine Head y los suecos Amon Amarth, con su gira conjunta Vikings & Lionhearts. El cartel cuenta además con The Halo Effect, una nueva banda compuesta por veteranos de In Flames y Dark Tranquillity.
Las entradas costarán 55 euros, si se compran de forma anticipada, o 65 euros si son adquiridas en las taquillas del Coliseum el mismo día del concierto.
La celebración del certamen fue aprobada a finales de año por el consejo rector del Instituto Municipal Coruña Espectáculos (IMCE), el organismo del Ayuntamiento de A Coruña responsable de las actividades culturales y musicales que se desarrollan en el concello. El festival, señalaron fuentes del gobierno local, nace con «vocación de permanencia», con el objetivo de convertir la ciudad en la sede de la vertiente otoñal del certamen mariñano.
Tras la pandemia, el ejecutivo que preside Inés Rey (PSOE) anunció su intención de que A Coruña recuperase su papel de referente del panorama musical del noroeste. El primer paso en esa dirección se dio con la contratación del concierto de Van Morrison previsto para el pasado 3 de diciembre, pero que por enfermedad del mítico cantante irlandés se ha tenido que aplazar hasta el próximo 31 de marzo.
El Resurrection Day es otra pata de esa estrategia, con una apuesta por el rock duro en recinto cerrado que complementará los conciertos a cielo abierto previstos en la edición de este año del festival de Viveiro, cuya celebración está fijada para entre los días 29 de junio y 3 de julio y que contará en el programa con las bandas Korn, Avenged Sevenfolds, Sabaton, Judas Priest y Deftones como cabezas de cartel.
Fuentes de la organización señalaron que desde hace años tenían la idea de hacer algo bajo la bandera del festival en otro punto de Galicia y fuera de la temporada de verano. Esa propuesta se ha concretado ahora con el Resurrection Day, que incluirá «más sorpresas y actividades» que complementarán los conciertos y que se irán desvelando a lo largo de los próximos meses.
Impacto económico
Desde su primera edición en el 2006, el Resurrection Fest se ha convertido en uno de los principales festivales de rock duro y los diversos géneros musicales de su familia en Europa. En el 2016 participaron 79 bandas, desde clásicos como Iron Maiden a nuevas formaciones. Se vendieron todas las entradas a ciudadanos de 36 países, entre ellos Indonesia o Japón. El festival superó los 80.000 asistentes y se convirtió en el más multitudinario de Galicia. Las estimaciones oficiales cifraron el impacto económico total en más de diez millones de euros, y se alcanzó el 100 % de ocupación hotelera en Viveiro y los municipios de su entorno.
Como ocurrió con la práctica totalidad de las actividades culturales y musicales, el festival tuvo que aplazarse por las restricciones implantadas por la pandemia del coronavirus, aunque se mantuvo activo con distintas actividades hasta que se pudiese retomar en su formato original. Si nada lo impide, regresará este verano con más de 110 bandas en cartel, y un spin-off otoñal en A Coruña que aspira también a consolidarse en los próximos años.