Carlos Macías apela a la nostalgia y la memoria de varias generaciones de ferrolanos con una muestra en la que reproduce a pequeña escala seis antiguas salas de la ciudad
28 feb 2022 . Actualizado a las 11:16 h.¿Qué tendrán las historias de los viejos cines de la infancia que siempre tocan el corazón? Si Giuseppe Tornatore conmovió a medio mundo con la entrañable amistad de Toto y Alfredo en su bellísima Cinema Paradiso, el maquetista Carlos Macías (Ferrol, 1949) ha querido tocar ahora la fibra sensible y la memoria de varias generaciones de ferrolanos a través de un puñado de pequeñas (grandes) obras que remiten al pasado cinéfilo de la ciudad. Desde hace ya unos cuantos días, en el bar Galerna de la calle Pontevedra —su particular sala de exposiciones—, este maestro de la arquitectura en miniatura exhibe seis maquetas de otros tantos cinematógrafos históricos de la urbe naval: el Jofre, el Callao, el Avenida, el Cinema, el Capitol y el Rena.
De todas estas salas, la única que sigue en activo es el Jofre (aunque ahora ya solo acoge espectáculos de artes escénicas y no alberga proyecciones de forma habitual), mientras que otras han desaparecido bajo la piqueta para dejar paso a otros edificios y diferentes usos, como el Callao o el Capitol; están cerradas a cal y canto mientras esperan por una segunda vida (el Avenida); o sufren un inconcebible e injusto abandono (el Rena).
Pero el recuerdo de todos esos cines, de absolutamente todos, permanecen indeleble en la memoria de miles de ferrolanos. También en la de Carlos Macías, que el pasado mes de octubre decidió iniciar su particular homenaje a esos antiguos templos del séptimo arte con la fabricación de la maqueta del Rena, la primera de las seis que componen la colección que se exhibe en el Galerna. Carlos cuenta que fue precisamente esta una de las piezas que más quebraderos de cabeza le dio, pero no por el proceso de fabricación en sí, sino por las dificultades con las que se topó para documentarse. En la tarea le echó una mano su hija Marta, y tras remover cielo y tierra y recurrir incluso a las redes sociales en busca de colaboración, Macías logró hacerse con unos planos de la planta y el alzado del emblemático inmueble, que diseñado por el arquitecto Eduardo Rodríguez-Losada e inaugurado en el año 1920.
Para fabricar tanto esta como el resto de las maquetas de los cines ferrolanos, el maquetista —antiguo trabajador del sector naval—, echó mano de su habitual método de trabajo, que está basado en el uso de herramientas «rudimentarias» y materiales reciclados siempre que es posible. En el supermercado Gadis de la calle María ya lo conocen y siempre que pueden le guardan las cajas de fruta para sus creaciones. Pero Macías también aprovecha para sus pequeñas obras otros muchos materiales, como palillos, envoltorios, estuches de vino o botellas de gaseosa. «Intento hacer casi todo con materiales reciclados, y lo que no se puede, lo compro, como los tableros de cartón para el fondo de las maquetas», explica Macías.
El maquetista ferrolano guarda un recuerdo especial de todos esos antiguos cines a los que iba en su infancia o juventud, pero el que late con más fuerza en su memoria es el del Callao porque de niños era uno de los espectadores fieles a su «sesión continua».
Tras haber concluido la serie de los cines, Macías está ya enfrascado en nuevos proyectos. Y es que su espíritu inquieto no le deja estar nunca de brazos cruzados. Estos días se afana en una maqueta de la esquina de la Casa Romero de Ucha —de la que ya tenía hecho un lateral— y en otra de la torre del Chalé Antón, también de obra del insigne arquitecto modernista.
EN CORTO
La cita. Las maquetas de los cines históricos de Ferrol que firma Carlos Macías se pueden ver en el Bar Galerna de la calle Pontevedra.
Redes sociales. En la página de Facebook Las Maquetas de Carlos se pueden ver algunas de las reproducciones fabricadas por este antiguo trabajador de Astano.