¿Cómo será la primera Semana Santa de la era poscovid en Barbanza?
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Noia y Rianxo estrenarán la nueva normalidad incorporando sendas procesiones
28 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Fueron las primeras grandes celebraciones que se suspendieron en el 2020, cuando irrumpió el covid, y tras dos años prácticamente en blanco, la Semana Santa regresa con fuerza a Barbanza. Las cofradías llevan semanas trabajando con el fin de restaurar los programas de actos litúrgicos y procesiones que había antes de la pandemia o incluso para mejorarlos. La idea es recuperar una cita que se encontraba en plena trayectoria ascendente.
Las cuatro cofradías que cada año suman fuerzas en Noia con el cura José Ortoño ya tienen el programa prácticamente listo. Incluyen en él las procesiones de siempre y una nueva que ya había sido organizada para el 2020, pero que finalmente no salió. Liderará este desfile el Cristo da Misericordia, que recorrerá las calles de la localidad el miércoles, tras el viacrucis. De la frustrada Semana Santa de hace un par de años también se rescatarán el pregonero, que será José María Fandiño, oftalmólogo y gran conocedor de la historia local; y el cartel, ilustrado con una fotografía de María Uxía Gandarela Fabeiro.
También la parroquia pobrense de Santa María A Antiga do Caramiñal tiene novedades de cara a esta edición de la cita religiosa por excelencia. Por vez primera, sacará en procesión la imagen del Cristo Resucitado el Domingo de Pascua y retomará sus propuestas estrella: el viacrucis, portado por una treintena de costaleros, y el encuentro. En marcha está ya el petitorio por las viviendas y los encargados de realizarlo destacan la ilusión con la que son recibidos: «A xente ten gañas de normalidade».
En el otro extremo de la villa pobrense también se están llevando a cabo los preparativos para que esta sea una Semana Santa normal. Desde la cofradía de la parroquia de Santiago do Deán apuntaron que este año recuperarán el cartel tradicional y de cara al próximo, tratarán de incorporar novedades: «Esta é unha edición de transición, para saír e demostrar que seguimos aí, pero queremos ir a máis».
También tiene todo listo para la gran cita religiosa la Irmandade do Cristo da Misericordia boirense, que ya empezará el día 8 con el pregón, que correrá a cargo del obispo auxiliar José Prieto. El responsable de la entidad, Plácido Amboage, señaló que se recuperarán todas las actividades e incluso está previsto que un grupo de vecinos se trasladen a Santiago el Domingo de Pascua para colaborar con la Cofradía de Veracruz para participar en su desfile.
Con el tiempo justo
La intención era volver a la normalidad también en Porto do Son, pero la Cofradía da Paixón do Noso Señor no ha tenido tiempo suficiente para organizar todas las actividades. El responsable de la entidad, Juan Pérez, explicó que se ha optado por suspender dos procesiones: la de los Dolores y la de la Borriquita. Además, tampoco habrá recorrido del viacrucis, que se reducirá a un acto en el interior de la iglesia.
Para Juan Pérez, esta es una edición de transición: «Levamos dous anos parados e volver á actividade non resulta doado. Despois do verán tiñamos moita ilusión, pero a chegada da sexta ola da pandemia freounos e agora foinos imposible recuperar todas as procesións. Aínda así, será unha volta da Semana Santa de Porto do Son por todo o alto».
Sí habrá vuelta a la normalidad en Rianxo, donde la Irmandade da Paixón de Cristo ha dado ya el pistoletazo de salida a los actos y el sábado procederá a la imposición de medallas. «Imos saír con toda a ilusión e a forza, porque xa había gañas», comentó Jesús Mariño, responsable de la entidad.
También pretenden recuperar el programa de siempre en Muros, incluyendo la singular procesión de la Palomita, pero el cura, Daniel Pérez, comentó que la decisión aún se tomó hace unos días: «Temos o tempo un pouco xusto, pero a idea é ir a por todas, volver á Semana Santa de sempre».
Las cofradías afrontan el regreso con una bajada importante de sus colaboradores
Tras dos años de parón, las cofradías encargadas de organizar las procesiones de Semana Santa son conscientes de que el regreso no será fácil. En algunas entidades se han producido bajas importantes a lo largo de este tiempo, sobre todo de gente joven, lo que podría derivar en problemas a la hora de contar con el número de porteadores necesarios para trasladar las imágenes. «Está costando conseguir colaboradores, temos que empezar xa a captar novos socios», explican desde la cofradía pobrense de O Caramiñal.
También en la Irmandade do Cristo da Misericordia boirense notan los efectos del parón: «Ao non haber procesións, a xente foise desvinculando, fai falla que se sumen os mozos». La Cofradía da Paixón do Noso Señor de Porto do Son ha hecho un llamamiento a todos los vecinos interesados en colaborar con las actividades que se están organizando y confía en reunir a los porteadores necesarios para los diferentes desfiles.