Las lluvias de abril y las vacaciones de Semana Santa propician el mejor momento para visitar los saltos de agua más espectaculares
04 abr 2022 . Actualizado a las 23:35 h.Son rincones idílicos para algunas personas, y grandes desconocidas para otras. Además de la cascada do Ézaro, uno de los principales atractivos turísticos de la Costa da Morte en Semana Santa, existen otras fervenzas en la provincia de A Coruña en las que descubrir auténticos parajes naturales. Rutas verdes que aguardan en esta época del año el caminar de turistas y senderistas. Primavera y otoño son las mejores estaciones para realizar este tipo de excursión al aire libre, por lo que las próximas semanas habrá regueros de personas que acudan con el objetivo de desconectar.
Es el caso de la cascada que crea el río Belelle, en Neda. Una caída de agua espectacular que se encuentra bien comunicada entre A Coruña y Ferrol. Se trata de una fervenza que mide unos 45 metros de altura, lo que la coloca como una de las más altas de toda la comunidad gallega. En sus alrededores también se encuentra un mirador para contemplarla desde otra perspectiva y varias sendas para caminar.
Las intensas precipitaciones habituales en abril ayudan a que el caudal de los ríos crezca y sus cataratas sean un regalo para la vista y los oídos. Otro ejemplo, de menor altura, está en Aranga. La cascada de Fervencedo ofrece esa conexión más directa con la tierra, ya que el río Fervenzas transcurre entre rocas completamente cubiertas de musgo y rodeada a su vez por una densa vegetación.
Entre Rus y Entrecruces hay dos cascadas separadas a muy poca distancia. La primera que se avista al iniciar la ruta de senderismo homologada, la PR-G142 —Ruta de las cascadas— es la de Rus o también conocida como de Ramil o Rego da Férveda. Se trata de un salto de agua bastante llamativo y con unos preciosos tramos de vegetación autóctona. En el final del recorrido también se puede contemplar la capilla de San Paio, con una bóveda de crucería gótica, y una pequeña área recreativa en la que reposar de la caminata.
En la sierra de Barbanza no hay discusión. Aquí es imprescindible ver la fervenza de Cadarnoxo, en Boiro. Se sitúa en un punto del regato de A Graña, que es un afluente del río Coroño. Se puede llegar en coche al lugar, pero es recomendable vivir la experiencia de caminar siguiendo el sonido del río, que transcurre por las piedras. El salto tiene un desnivel de unos cincuenta metros, y la caída de agua es de forma escalonada.
Un último ejemplo de la gran riqueza fluvial que posee la provincia coruñesa puede ser el salto de agua de As Hortas y su ruta de senderismo homologada —PR-G 169— que invita a evadirse de la rutina. Ubicada en Arzúa. La cascada tiene una caída de unos 30 metros de altura y el recorrido para viandantes casi 20 kilómetros de distancia. Sin duda es uno de los lugares más visitados del municipio y este 2022 no será diferente.
Todas ellas suponen una pequeña muestra del turismo verde y sostenible que cada año suma nuevos adeptos y que es una perfecta opción para pasar tiempo en compañía durante esta Semana Santa.
Calzado adecuado y protección solar como principales aliados en las excursiones
Los expertos en senderismo siempre aconsejan realizar estas actividades con total seguridad y conocimiento del lugar. Para ello, es muy importante utilizar un calzado adecuado para las caminatas y que evite los resbalones en rocas húmedas. También se recomienda el uso de prendas transpirables y por capas, con el fin de poder regular mejor la temperatura corporal. Nunca debe faltar la protección solar en cara y cuerpo. En algunos recorridos homologados se puede estar expuesto al sol y los rayos uva en tiempos prolongados. El otro aspecto crucial es acudir siempre a zonas que estén bien señalizadas o que se conozcan de antemano para evitar perderse en una zona de difícil acceso. Por último, las excursiones se deben hacer en compañía para en caso de sufrir un accidente poder pedir ayuda.