El Concello de Ourense pone en marcha un servicio de audioguías para visitar el castro
02 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El castro de Santomé pasa por ser el gran desconocido del patrimonio histórico de la ciudad de Ourense. Cita recurrente para visitas educativas y rutas del entorno periurbano, el conjunto cuenta con una singularidad y una riqueza constructiva, natural y paisajística que son desconocidas para la gran mayoría de los ourensanos. Hace años que se promovieron iniciativas como la señalización o la instalación de un punto informativo, acciones a las que se incorpora una nueva propuesta del Concello: un servicio de audioguías en varios idiomas para las personas que lo deseen. Cuentan con contenidos y datos para conocer más en profundidad y en conjunto, el recinto arqueológico.
La audioguía está disponible en la página web de la Concellería de Turismo de Ourense (https://www.turismodeourense.gal/audioguias/audioguias-santome/) y se puede optar por varias alternativas idiomáticas: gallego, castellano, inglés, francés y portugués. A través de trece apartados se hace un pormenorizado repaso del conjunto arqueológico y se puede conocer una compleja realidad que va desde su ubicación privilegiada y estratégica hasta las diferentes tipologías de vivienda que se fueron sucediendo en el lugar, así como los hallazgos más importantes realizados en las sucesivas campañas de excavación. Para la concejala de Turismo y Termalismo, Flora Moure, era necesario: «E fundamental a posta en valor da nosa riqueza cultural como polo de atracción turística, e logo da mellora do castro de Santomé efectuada no anterior mandato, grazas á cooperación coa Xunta de Galicia, continuamos a traballar para impulsar a nosa riqueza patrimonial como oportunidade turística singular de Ourense».
Del castro a la cultura romana
El yacimiento arqueológico está ubicado en un entorno estratégico —junto a la garganta del río Loña y con una visión privilegiada de la zona— y comprende una etapa que va desde los siglos I y V después de Cristo. Es ejemplo de la «evolución histórica que experimentou a periferia do val de Ourense dende a época castrexa á galaico-romana». Una de las circunstancias que mejor define dicho proceso es la tipología de las casas y el entorno: de las viviendas redondas de los pobladores indígenas a las rectangulares, más adelante, y luego la villa romana de la última fase —con patio y varias estancias, hasta una con dos plantas y dependencias adyacentes— con elementos como la «trébede» para calentar la casa, a la creación de calles y empedrado del suelo.
Entre los elementos singulares que se conservan en el castro de Santomé figuran, junto a los diferentes conjuntos habitaciones, zonas como la del antiguo lagar —para vino y aceite— y el espacio columnado luego convertido en herrería, el torreón o la zona de cultivo, entre otros aspectos.
Naturaleza, paisaje y hallazgos
Espacios destacados son también el cañón del Loña —con las formaciones geológicas de las marmitas de gigante excavadas por la fuerza de la corriente de agua en la roca granítica— y el entorno natural, donde se preserva una vegetación autóctona que incluye robles, alcornoques, pinos mansos y madroños, entre otros, y especies como la «bolboreta dos érvedos». El lugar es además un mirador privilegiado sobre la ciudad y las asentamientos poblaciones del valle. De la actividad desarrollada en el yacimiento arqueológico dan cuenta hallazgos como los diferentes tipos de teja —curva y plana—, clavos y grapas de hierro, un compás, residuos del trabajo con el hierro, una pieza de bronce para filtrar el agua o la placa de un cinturón representando a un caballo, entre otras piezas. Se pueden ver en el Arqueolóxico.