Santiago Paz: «Una línea de minicruceros eléctricos navegará la ría de Arousa y cubrirá etapas»

La orilla sur de la ría de Arousa está a punto de experimentar una verdadera revolución en materia turística, firmemente sostenida sobre el fenómeno xacobeo. Dos planes nacionales concedidos a Vilagarcía y a la Mancomunidade do Salnés, y los diseños de cohesión que ha puesto en marcha la Xunta a través de Turismo de Galicia, movilizarán más de siete millones de euros en los próximos tres años, procedentes de los fondos de recuperación. Santiago Paz Noya (Bruselas, 1968) dirige la consultora Dos Espacios y es uno de los mejores conocedores de las líneas que guían e inspiran este proceso.

—El papel del Camino parece clave en este inminente desarrollo.

—Lo es. La temática que el Gobierno central planteó el año pasado para sus planes extraordinarios de turismo apuntaba al Xacobeo. Solo se podían presentar territorios y localidades que estuviesen en el Camino de Santiago. Con esa visión se piensa en la ruta de la Traslatio, ese viaje originario por mar de los restos del Apóstol. La mancomunidad decide presentar su propuesta, que también incluye a Vilagarcía de Arousa, y Vilagarcía, además, presenta un proyecto propio. La primera decide optimizar sus cuatro recorridos vinculados al Camino, fortalecer la Variante Espiritual y extender la cultura marinera y el mar entendido como un recurso. Y Vilagarcía apuesta por la recuperación de su fachada marítima y el desarrollo del turismo ciclista, que conecta con la intención de convertir Galicia en un destino cicloturista.

—Da la impresión de que esta vía marítima es, quizás, la menos explotada de las rutas xacobeas.

—Es la menos conocida, sí. La idea es recuperar experiencias turísticas con la ruta Traslatio y adecuar los destinos en tierra con este enganche náutico. Esta es la visión. Por ejemplo, dentro del plan de cohesión se propone una línea de minicruceros por la ría, una serie de barcos eléctricos con escaso calado que permitirán cubrir etapas e incluso remontar el Ulla hasta Pontecesures.

—¿De qué potencial estamos hablando?

—Es enorme. En las dos orillas de la ría existen instalaciones náuticas que, en muchos casos, disponen de la Q de calidad. Y, por lo tanto, deben funcionar como la base de una experiencia turística de calidad. Se calcula que unos 17.000 turistas náuticos navegan por el exterior de la ría, de los cuales solo una pequeña parte se internan en Arousa. Pensemos, además, en su conexión con las rutas del vino vinculadas a Rías Baixas y las experiencias enogastronómicas. Los fondos se emplean en que los destinos mejoren sus infraestructuras y su potencial turístico, trabajando la colaboración público-privada. La puntuación de los proyectos gallegos fue de las más altas, lo que quiere decir que en Galicia se ha trabajado a un nivel superior al de otras comunidades.

—¿El desarrollo digital también está contemplado?

—Claro. Los fondos, a nivel presupuestario, tienen cuatro ejes: eficiencia energética, transición verde sostenible, transición digital y competitividad. Es necesario cumplir un mínimo en cada uno de ellos. Así pues, la transformación digital está contemplada.

—En ocasiones no es fácil visualizar esa transformación en un ámbito como el turístico

—Lo que el denominado Big Data nos permite es, sobre todo, predecir tendencias y reunir toda la información necesaria para tomar decisiones. Es una forma proactiva de resolver problemas, de anticiparte, de ser más eficiente con los recursos, incluidos los consumos energéticos, y de mover flujos de gente de forma inteligente. Si tienes esa información, serás capaz de orientar y de cambiar tendencias.

—Ahí entran Dos Espacios y el centro Galicia TurisTIC, que acaba de echar a andar en Vilagarcía.

—Como consultora estamos trabajando y capacitando equipos para trabajar toda esa vertiente de inteligencia turística. Galicia TurisTIC es un proyecto impulsado por el Clúster de Turismo de Galicia para disponer de un centro en el que se pueda ayudar el sector turístico a aplicar innovación y tecnología, con laboratorios de demostración a precios muy asequibles para las empresas que quieran desarrollar sus proyectos tecnológicos. El objetivo es generar un ecosistema de emprendedores que permita crear empresas, que el empleo de calidad crezca en la zona y que los jóvenes se puedan formar y trabajar. Aplicando innovación, el turismo en Vilagarcía y O Salnés, como en toda Galicia, puede ser una industria, no un sector de servicios atomizado.

—¿Puede ponerme algún ejemplo práctico de esta transformación?

—Presentamos un proyecto con cuatro comunidades y el mayor operador asiático para que el turista chino disponga de todos los contenidos traducidos a su idioma y adaptados a su cultura. Un visitante inmaduro, que aún no esté acostumbrado a viajar y no sepa inglés, estaría perdido aquí. Galicia les encanta. Y las herramientas digitales nos permiten ofrecerle esa información en el móvil, en la palma de la mano.

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