La mitad de los concellos de la Costa da Morte están a favor de aplicar una tasa turística
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Defienden que el tributo ayudaría a sufragar los sobrecostes que generan los visitantes para sus arcas
19 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.La imposición de una tasa turística a los visitantes es un debate que ya viene de lejos en ciudades gallegas punteras en el sector como Santiago de Compostela. No obstante, toda vez que los destinos rurales van ganando terreno, es una cuestión que también se traslada a los concellos de menor población.
En la Costa da Morte, la opinión está dividida, si bien desde una mitad de los consistorios que son potenciales destinos turísticos defienden la implantación de una medida de este tipo. Asunto distinto es cómo llevarla a cabo. Sobre todo, porque el gravamen por turista o pernoctación es una medida que excede el marco legal de las competencias de los concellos. Tendría que establecerlo la comunidad autónoma. Es algo que ya sucede en Cataluña o las Islas Baleares.
No obstante, son varios los ayuntamientos que consideran que es un tema que la Xunta de Galicia debería de valorar, algo que no contempla, según manifestaron, para poder sufragar los sobrecostes que genera el turismo para las Administraciones locales y que, como consecuencia, afecta a los habitantes, que pese a pagar sus impuestos, ven como una parte de estos no se invierten en ellos. Estos son Fisterra, Muxía, Vimianzo y Cee, según han manifestado desde las alcaldías.
De otro lado, también hay voces en Carballo y mismo en Cee que insisten en que sería necesario empezar por cobrar por otros servicios más simples y que ya se están ofreciendo, como visitas a monumentos o la organización de actividades y que, en muchos casos, sí se podría hacer a través de ordenanzas municipales. En todo caso, lo que tienen claro los defensores de la medida es que esos ingresos serían para cubrir gastos derivados del turismo y, a la vez, para invertir en esos bienes y servicios, de modo que sería favorable para todos: turistas, ciudadanos, concellos, negocios... De hecho, no creen que la cuantía de la tasa tuviera efectos contraproducentes como el descenso de turistas, sino lo contrario. Piensan que es una forma de poner en valor lo nuestro.
En otra parte, están los concellos que se muestran en contra de la medida, aunque muchos de ellos tampoco lo hacen de forma rotunda, sino más bien, centrándose en lo presente, esto es, amparándose en que todavía es algo que no han estudiado o que, por el momento, no ven necesario dado que no alcanzan la condición de destinos turísticos consolidados o masificados. En todo caso, algunos sí reconocen que los turistas generan un gasto extra para las arcas de sus concellos, algo que en estos instantes, no les genera un problema grave. También defienden en algunos de estos casos que la propia Xunta debería destinar más fondos a aquellos lugares que son turísticos por excelencia, o que hay que potenciar el turismo extensivo frente al intensivo así como la desestacionalización. Mantienen esta postura en la comarca Camariñas, Laxe, Ponteceso, Dumbría y A Laracha. La propia Xunta se ampara en que Galicia tiene un modelo turístico muy diferente a Baleares y Cataluña, y apuesta por diversificar el sector durante todo el año.
Los gastos de basura, personal, saneamiento y limpieza se incrementan
Uno de los principales servicios en los que los concellos notan el incremento del gasto con la llegada de los visitantes es en la recogida de residuos. En lugares como Fisterra, Muxía y Cee, los regidores aseguran que llega a doblarse en la temporada alta. Otro en el que el incremento es muy notable es el saneamiento. El acondicionamiento de espacios públicos como la limpieza de calles, maleza, playas y aparcamientos requiere, asimismo, de más inversiones.
En Vimianzo y Cee tampoco se olvidan de los costes relativos al refuerzo del personal para actividades de ocio como visitas guiadas o la ampliación del horario para acceder a ciertas instalaciones históricas como en Soneira son el castillo o los batanes. La alcaldesa, Mónica Rodríguez, incluso destaca las importantes inversiones que realizan en el castro de As Barreiras para llevar a cabo las excavaciones. Por su parte, la responsable de Cee, Marga Lamela, presta atención, asimismo, a la contratación de policías locales en los meses de más afluencia para ofrecer una mayor seguridad en las fiestas.
No obstante, en este sentido, otros alcaldes como los de Dumbría o Camariñas rebaten estos argumentos aludiendo al propio uso que hacen los vecinos de estos servicios coincidiendo con el retorno de personas que residen lejos o la celebración de buena parte de las ceremonias del año. En la capital del encaixe, Sandra Insua defiende que las visitas a la villa ya traen beneficios indirectos a los pueblos a través de los gastos en los negocios y habla de una economía circular que se da cuando los camariñáns viajan a otros sitios.
Cuantías simbólicas y asequibles, también sobre la hostelería
Las tasas deberían de ser asequibles y mismo simbólicas, están de acuerdo en señalar los representantes de los concellos que se muestran a favor de esta medida para que sea asumible para todos. Ponen de referencia la cantidad de un euro o 1,5. El alcalde de Fisterra, José Manuel Marcote, defiende el tributo mismo sobre la hostelería para los que no pernoctan.
Insisten en que el patrimonio también exige un mantenimiento que, como tal, tiene un coste. Mismo si se organiza una ruta guiada, además del gasto del técnico que la dirige habría que sumar el del servicio de una ambulancia, comenta la responsable ceense.
El regidor de Muxía, Iago Toba, ve conveniente que sea una medida a adoptar de forma conjunta, al menos entre los concellos que son destinos consolidados. En este sentido, cree que habría voluntad y entendimiento por buena parte de ellos.
En el apartado de gastos extra, Toba incluye la cultura, incidiendo en que hay que ofrecer más que un destino, «contido»: «Os tempos mudan e os servizos son máis esixentes». En esta apreciación coinciden muchos, al igual que en que las ayudas percibidas por parte de las Administraciones son insuficientes. Marcote invertiría en el cuidado ambiental, asegura.
Una temporada alta más larga y con una mayor concurrencia
La temporada fuerte es ahora más larga y, cada vez, de una mayor concurrencia, coinciden en señalar los regidores. Empieza en mayo y se extiende hasta finales de octubre y va in crescendo. Son meses en los que en Muxía superan el 80 % de ocupación, ya no solo en hoteles referentes como el parador, sino en apartamentos turísticos y casas rurales, indica el alcalde, Iago Toba. En Fisterra ocurre lo mismo con el Camiño, sobre todo.
Este debate es un tema que debe ser abordado en la Asociación de Turismo Costa da Morte (CMAT), comenta. El concejal de Turismo en Carballo y responsable de la sección en la Deputación, además de vicepresidente, Xosé Regueira, es algo que cree que debe ponerse sobre la mesa en los entes de gestión, más pronto que tarde. «Somos dos poucos destinos de Europa que ofrecemos todo gratis. Como abordar a explotación turística, máis alá da promoción, para xerar emprego, por exemplo, sen competir coas empresas privadas, débese estudar xa», dice.
Con estos ingresos extra, las estancias serían más placenteras, destacan muchos. Toba estaría de acuerdo en invertir el dinero de las tasas en áreas de servicio o parques infantiles, y en compensar a los vecinos con un porcentaje para servicios sociales.