UNA NOCHE PARA LA HISTORIA | El campo de O Conco vibró con la banda y sus invitados, broche del festival
29 may 2022 . Actualizado a las 19:49 h.Dumbría quería una noche para la historia, y la tuvo. Quien sabe si en el Marco do Couto la mismísima escultura del Vákner danzase al ritmo que le imprimieron Luar na Lubre y sus invitados a la primera edición de un festival que lleva, precisamente, el nombre de este lobishome. En el campo de fútbol de O Conco se respiraba el sábado ganas, ambiente. Abrieron el espectáculo, previa presentación de la noche por Pepe Formoso, los Gaiteiros de Buxantes, también alma de Invernía: trajes de gala, sonido fino, 17 dignificadores de la gaita y la música tradicional sobre el escenario, nueve mujeres. El corno del poeta y guía fisterrán Alexandre Nerium atravesó varias veces el campo. Fue una velada de talento en el «epicentro do Territorio Vákner», una «noite única», como dijo Bieito Romero, líder de Luar na Lubre. Todo un homenaje a la tierra, y al propio Camiño.
La banda empezó a despertar las emociones con No Cebreiro, con el cura Elías Valiña en la memoria. Siguió el Madrigal de Lorca, Chove en Santiago, y ahí entró uno de los monstruos artísticos de la noche, Ismael Serrano. A estas alturas, el sol se ponía tras los piñeiros. Después, Duium y Mártiros e o Vákner, esta última con Carlos Goñi, líder de Revólver, en un mano a mano con Irma Macías, perfecta embajadora de Vimianzo, perfecta voz contando leyendas como la del peregrino «agochado».
Para Dumbría recuperó Luar na Lubre la pieza Hai un paraíso (2004). O Afiador, en la voz del referente Víctor Manuel, se llevó muchos aplausos, como había pasado cuando la banda presentó su disco Ribeira Sacra en Ourense. Ovación, también, y después del Camiño dos celtas, para la joven dumbriesa Alexandra Suárez. Su voz, junto con la de Irma, estuvo muy a la altura del exigente tema Romeiro ao lonxe, que tantos recordarán con la prodigiosa voz de Diana Navarro. Un listón altísimo que confirma su valía vocal. Pudo marcar para ella el Festival Vákner un antes y un después. Comentaba días antes que ni habría soñado estar en este mágico escenario.
El Concello de Dumbría: «Seguramente sexa o primeiro de moitos»
El disco número 19 de Luar na Lubre, Vieiras e vieiros, historias de peregrinos, tuvo mucho peso en este concierto, pero tampoco faltaron grandes clásicos como O son do ar o Nau. Fonte do Araño, de Emilio Cao, permitió disfrutar de Ismael Serrano de nuevo sobre el escenario, al igual que Benvido, que en Vieiras e Vieiros interpreta Miguel Ríos, permitió a Goñi confesar «mi absoluto respeto y admiración por esta banda [Luar na Lubre] desde hace veinte años». Bailaron Xiao Mogín y Patricia Teixeiro, sonó The sailors hornpipe / Pasacorredoiras, e incluso hubo tiempo para hablar de los orígenes de Colón o de Paz Andrade. A Luar na Lubre le pidieron bises, y lo que llegó después se quedará en el recuerdo. El Camariñas en la voz de Víctor Manuel que hizo levantar al público, Dum Pater familias y Tu gitana. Casi dos horas de puro espectáculo.
«Foi unha noite histórica, non só por ser un concerto nunca visto ata o momento, senón tamén por poñer en valor ao Vákner. A historia do monstro que se lle apareceu a un bispo armenio hai seis séculos na súa peregrinaxe polas terras de Dumbría non podería estar máis viva», valoraron tras este primer festival Vákner desde la organización. El Concello, vía redes, trasladó efusivas gracias a todos quienes hicieron posible lo vivido, augurando más ediciones: «O primeiro de moitos». Una bestia trajo de vuelta la emoción de la música en directo. Revolucionario es.