Su empuje artístico lo continúan cada vez más concellos y espacios de la comarca
13 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Termina el festival Rexenera Fest y, con él, un hito más en el papel capital que desempeña Carballo en el arte urbano de Galicia, aunque muy probablemente, para ser preciso, haya que extender ese rol a toda España. Ya lo tenía, pero este nuevo Rexenera en el que han participado cinco artistas más ha permitido ahondar en ese protagonismo cultural que comenzó hace nueve años. Aquella lucha inicial contra el feísmo medianero ha transitado incesantemente hacia una enorme galería a calle abierta en la que han trabajado artistas de relieve internacional.
La capital de Bergantiños, de manera directa o indirecta, también ejerce de locomotora para que estas experiencias artísticas se vayan repitiendo en otros puntos de la Costa da Morte. Lo que era excepción ya parece norma. Antes que estas últimas cinco obras carballesas, Laxe estrenó otra de Yoseba MP, con muchas huellas de su trabajo en la zona. Fue encargado por la cofradía y está dedicado al Naufraxio identitario de Laxe. Poco después, en mayo, Doctor Toy creó en la plaza de Vimianzo a una mujer junto a la Cruz do Loureiro, observando el valle soneirán. Yoseba también dejó su sello en Malpica con un imponente barco, con referencias a Castelao que fueron objeto de debate político, y en Baio reflejó el ambiente de la Festa da Carballeira. En esta localidad, la pinturas impregnan el instituto. Y en O Couto, Ponteceso, creó una prominente alegoría de mujeres poderosas, las «corta lumes, brigada do machado».
En otro centro educativo (son espacios relativamente comunes para estos trabajos), las enormes pinturas exteriores del colegio de A Ponte do Porto, obra de Mutante Creativo, están dedicadas a las mujeres, como hay otro en Cee en favor de la igualdad en la plaza Otero Lastres. En la plaza de O Pendón, en Cabana, Leandro Lamas creó su obra junto a alumnos de As Revoltas, también con mensaje igualitario. La rotonda de O Couto hacia Corme o el puerto de Muxía son otros lugares con creaciones de impacto. Incluso la parroquia de Carballo tiene dos, en el atrio de la iglesia y en A Milagrosa.
Xosé Regueira: «O festival tivo a súa parte emotiva coa sorpresa do mural de Udatxo»
Con dos murales todavía a punto de ser cerrados, con los últimos detalles en marcha durante la jornada de ayer, el edil de Turismo, Xosé Regueira, valoraba cómo ha ido esta experiencia que ha durado unos diez días en su conjunto: «Foi unha nova edición con novos retos e moita calidade. Á galería incorpóranse cinco novas obras de artistas consolidadas no escenario estatal e internacional que pasan a formar parte dun elenco de primeiro nivel no escenario da arte pública mundial e que temos a sorte de disfrutar das súas obras en Carballo».
Regueira alude a una de las obras que más están llamando la atención, por su referencia a la historia local, por su céntrica ubicación, y por situarse donde antes había otro: «O festival tamén tivo a súa parte emotiva coa sorpresa do mural de Udatxo, que nun primeiro momento espertou a desconfianza por estarse repintando un muro no que había unha obra moi querida por parte da xente, a da india Samia Singh, que foi das primeiras e que se atopaba xa en moi mal estado. Pero nada máis concluír a primeira xornada xa se tiña ganado o apoio das persoas que inmediatamente recoñeceron ao protagonista do mural», el panadero Marcelino Rodríguez, de A Casilla.
El panorama actual le debe mucho a aquel andamio al que se subieron, en diciembre del 2013, Paula Fraile y Roberta Venanzi, junto a la rotonda de la calle del sol, en un espacio que antes había ocupado una pequeña casa. desde hace al menos cuatro años, un desconchado desluce (o atestigua el paso del tiempo) una parte de ese mural que echó raíces en Carballo, porque además se inspiraba en los robles.