Las viviendas de uso turístico ya superan a las de alquiler tradicional en A Coruña
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Los alojamientos vacacionales, al 80 % de ocupación en junio y julio
26 jul 2022 . Actualizado a las 18:37 h.En A Coruña hay actualmente 614 viviendas de uso turístico con un total de 2.910 plazas, y el 80 % ya están reservadas en junio y julio, según Aviturga, la asociación sin ánimo de lucro de ámbito autonómico que representa a los propietarios de este tipo de espacios en la comunidad gallega.
La última cifra que maneja la Xunta, del 31 de mayo, es de 577, mientras que el INE ofreció ayer los datos relativos a febrero, cuando eran 551. La tendencia ascendente es clara, ya que el año pasado eran 456. De hecho, los alojamientos de vacaciones superan ya a los que se rentan en régimen ordinario, con 596 disponibles este mes de junio en el portal inmobiliario Idealista.
Desde Aviturga consideran que el volumen «no es tan grande para una ciudad como A Coruña». «En Galicia, solo el 16 % de las viviendas de uso turístico están en las ciudades, ya que en las urbes hay otras opciones como hoteles o albergues, mientras que en las zonas intermedias y menos pobladas han proliferado muchas más por la falta de competencia». En cuanto a que el número sea superior a las disponibles para alquiler ordinario, indican que «es un debate presente, tanto en la sociedad como en la asociación», pero que no se puede culpar a los propietarios de las viviendas de uso turístico de la poca oferta en alquiler. «Se debe a diversos factores, como la escasez de edificaciones, la precariedad e inestabilidad laboral, que impiden a la gente comprar un piso, y la falta de obra nueva».
Rafa Serrano, propietario de una vivienda de uso turístico: «Tengo un apartamento en el Orzán alquilado para toda la temporada»
El vicepresidente de Aviturga, Rafa Serrano, lleva cuatro años alquilando un piso a turistas en el Orzán. «Tengo todo reservado hasta septiembre y ya el mes de mayo lo tuve ocupado», indica Serrano, que añade que el tipo de visitantes es variado. «Antes de la pandemia había mucho público internacional, y ahora se está recuperando tras el parón por el covid».
En su caso, la vivienda, de tres dormitorios, con salón y terraza, estuvo ocupada el mes pasado por dos grupos de peregrinos de Irlanda y Francia. Este mes, los primeros días se alojó una familia de Italia y ahora se instalará otra de Madrid. «A final de mes vendrá una de Estados Unidos y en julio tengo otro grupo familiar madrileño, que viene todos los años 20 días».
El próximo mes será el turno de dos familias, una de Portugal y otra inglesa. «He notado que tras la pandemia hay una tendencia de viajar varias generaciones juntas: abuelos, padres e hijos. Están más cómodos que en un hotel porque cocinan y tienen espacios comunes».
En agosto, los ocupantes del piso, que se oferta desde 80 euros la noche en verano, son nacionales, de Logroño y también de la provincia de A Coruña. «Es otro cambio que introdujo el coronavirus. Antes la gente se apretaba en casa para acoger a sus familiares, pero ahora prefieren alquilar un apartamento por precaución ante el virus», dice Serrano, que en septiembre rentará el espacio a un trabajador. «Es otro perfil que también abunda. Gente que se desplaza un mes o dos a otro sitio por trabajo, por lo que no encuentra vivienda en alquiler. Como el piso tiene wifi y zona de trabajo, cumple las características que buscan». En este sentido, señala que la pandemia supuso la demanda por parte de los usuarios de un área en el piso para trabajar. «El teletrabajo permite que la gente viaje igual con su familia y cumpla con sus obligaciones laborales desde ese lugar».
La Policía Nacional, Airbnb y Confianza Online alertan ante posibles estafas
La Policía Nacional, junto a Airbnb y Confianza Online, alerta ante posibles estafas en alquileres vacacionales. «La recuperación de estos espacios se ha acelerado considerablemente durante el primer trimestre del 2022, superando incluso los niveles del 2019, antes de la pandemia».
Para evitar timos recomiendan reservar con antelación, sobre todo a quienes no están habituados a buscar por internet o desconocen el funcionamiento de las plataformas dedicadas a ello. También piden precaución ante enlaces sospechosos, ofertas demasiado ventajosas y la forma de pago. «Si te piden un depósito o transferencia, si te dan una factura en PDF o en papel o te ofrecen un descuento por pagar fuera de la plataforma, desconfía».