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Veintiuna patrullas se disputan el concurso de la Brilat de Pontevedra por el Camiño de Santiago

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

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La brigada introdujo modificaciones para estudiar la posibilidad de abrir la prueba a civiles

22 jun 2022 . Actualizado a las 21:15 h.

Finalmente, fueron veintiún los equipos de tres militares que tomaron la salida en Tui para completar los 120 kilómetros que componen el desarrollo del Concurso de Patrullas por el Camiño de Santiago que desenvuelve la Brilat desde hace más de dos décadas. Esta edición, además, con la salvedad de introducir una serie de novedades encaminadas a estudiar las «posibilidades de apertura de la prueba al mundo civil», reseñaron desde la brigada pontevedresa.

De este modo, se han establecido dos categorías. Por un lado, la Compostela, en la que compiten patrullas de tres militares que deben cubrir la totalidad de los 120 kilómetros y las siete pruebas que se intercalan en el recorrido, y, por otro, la Azor, en la que intervienen equipos de tres patrullas de tres componentes que, por relevos, recorren un tercio del trazado cada una de ellas.

La intención que se busca es acercar esta prueba a la población civil sin que esto signifique perder su idiosincrasia. No en vano, esta competición «está considerada como una de las pruebas militares más duras de España, puesto que al recorrido de 120 kilómetros portando mochila, equipo y armamento reglamentario, hay que añadir la realización de siete pruebas de carácter eminentemente militar».

Así, la primera de estas es un recorrido topográfico cuya localización se desvela al comenzar la misma para, a continuación, desarrollarse un ejercicio de tiro de precisión con fusil en la base de la Brilat, donde los participantes tendrán que superar, asimismo, una pista de obstáculos.

El siguiente paso se sitúa en el puente sobre el Lérez en Monte Porreiro, en Pontevedra, del que deberán descolgarse realizando rápel para, acto seguido, cruzar a nado el río pontevedrés. La penúltima etapa se sitúa en Padrón, en las proximidades del río Ulla, donde tendrán que demostrar su precisión en el lanzamiento de granadas, mientras que la séptima y última prueba es un recorrido cronometrado que, al igual que ocurría con la primera, su localización se mantiene en secreto.

Está previsto que esta tarde, a partir de las 18.30 horas, se proceda a la entrega de trofeos en la Praza do Obradoiro de Santiago, donde se sitúa la meta.