En esta ocasión, de forma pionera, se utilizó nitrógeno para marcar a los animales, en lugar de hacerlo a fuego
26 jun 2022 . Actualizado a las 22:40 h.La Rapa das Bestas do Campo do Oso, en Mondoñedo, volvió ayer a celebrarse con un éxito de público. Los amantes de esta celebración de sabor ancestral, que remite a la dialéctica milenaria entre el ser humano y la naturaleza, pudieron ayer disfrutar de nuevo de la espectacularidad de la fiesta, tras dos años de pandemia y un 2019 en el que la niebla obligó a aplazar el evento.
Los asistentes se deleitaron en la 43 edición de la Rapa das Bestas con las impactantes imágenes de la lucha entre aloitadores y caballos. Escenas que no se podrán presenciar en A Mariña hasta el año que viene, ya que es el único evento de sus características que se celebrará este verano en la comarca. En lugares con una honda tradición ganadera, como San Andrés de Boimente (Viveiro) o Santo Tomé (O Valadouro), se suspendieron las citas.
La Asociación de Criadores do Cabalo de Pura Raza Galega, en colaboración con el Concello de Mondoñedo y con la ayuda del área de Medio Rural de la Diputación, organizó el evento.
El público se congregó en el curro para ver de nuevo escenas como la salida de los jinetes, la bajada de los animales, el corte de las crines y el marcado de los ejemplares. En esta ocasión, de forma pionera, se utilizó nitrógeno para marcar a los animales, en lugar de hacerlo a fuego. Así, el sellado es indoloro para el ganado.
A continuación, los asistentes pudieron disfrutar de una sesión vermú y una degustación de potro gallego. Desde el Concello celebran «gran asistencia de xente» y agradecen «o gran traballo» realizado por la organización.