El albergue de Carril estará terminado este mes, pero aún no tiene fecha de apertura

El 31 de julio deberá estar rematada la construcción del albergue de peregrinos público de Vilagarcía, pero eso no quiere decir que pueda ya abrir al público. Entonces todavía faltará equiparlo, es decir, instalar las camas, la lavadora y el microondas, y eso ya depende de la Xunta de Galicia, según informa el alcalde, Alberto Varela. «Xa que Vilagarcía volve a poñer unha infraestrutura marabillosa a disposición da Xunta, polo menos que fagan o esforzo de amoblala. Todo dependerá do áxil que queira ser a Xunta de Galicia en dotala de mobiliario».

El regidor se pronunció en estos términos este lunes, a propósito de una visita que hizo a las instalaciones junto a la presidenta de la Diputación de Pontevedra y horas después de que el PP de Vilagarcía expresase su malestar por el retraso que acumula este proyecto.

Alberto Varela no pasó por alto estos reproches: «Teño que pedirlle ao PP, xa non humildade, pero si que sexan comedidos e prudentes, que non fagan máis o ridículo». En este contexto recordó que la ejecución de esta obra estuvo plagada de problemas por motivos ajenos al Concello: la renuncia de una empresa, la crisis de suministros, la pandemia... «e pese a estas dificultades, este goberno conseguiu salvar os obstáculos e imos rematar a obra no seu prazo», indicó el socialista visiblemente molesto con las críticas del grupo popular.

Su tono cambió radicalmente a la hora de glosar las bondades del nuevo edificio, que presentó como «o albergue máis fermoso do Camiño de Santiago», y de la Diputación, sin cuya colaboración económica sería imposible haber realizado esta obra. «Podemos estar plenamente satisfeitos por facer posible o que deberan ter feito outros. Que Carmela Silva siga moitos anos na presidenta e revolucionado a provincia de Pontevedra», señaló Alberto Varela. La Diputación aportó, a través del Plan Concellos, los 600.000 euros que costó levantar el nuevo albergue sobre una estructura de lo que iba a ser un centro social que quedó a medio construir.

Carmela Silva se mostró muy satisfecha con el resultado de la obra, diseñada por el mismo equipo técnico que proyectó la galardonada Escola Infantil de Vilaxoán, y vaticinó que tiene opciones a recibir un premio de arquitectura. «Os peregrinos non van querer marchar desta construción extraordinaria, así que o alcalde vai ter un problema», bromeó la presidenta en alusión a la factura y el lugar en que se encuentra el inmueble.

Además, Silva aplaudió la apuesta del Concello por este proyecto: «O albergue de Carril demostra que en Ravella hai un goberno local que pensa no desenvolvemento de Vilagarcía e que na provincia hai unha Deputación que apoia a tódolos concellos». Recordó que el albergue va a ser cedido a la Xunta y que, por tanto, «é a administración que tería que ter feito esta obra, ao igual que fai noutros concellos».

El edificio tiene capacidad para treinta plazas y ocupa 500 metros cuadrados que se reparten en tres plantas y dispone, además, de finca exterior. En el bajo está la recepción, el vestíbulo y la biblioteca; hay zona para lavandería y para bicicletas, hay consignas, salas de espera y dormitorios comunitarios con seis literas cada uno. Los peregrinos dispondrán de mesas de lectura, iluminada por una cristalera con vistas a la ría, y de terraza.

Los hospedajes para peregrinos de Vilanova y Meis, a un 80 % de ocupación

El de Carril se sumará a la red de albergues que hay en la comarca dentro del itinerario del Camino Portugués y de la Variante Espiritual que cruza O Salnés. Hay cuatro albergues públicos en Valga, Pontecesures, Vilanova y Meis, a los que hay que sumar otros de carácter privado. Víctor Abal, que gestiona varios establecimientos en Vilanova y Meis, informa de que está habiendo una alta demanda para este tipo de alojamiento. A día de hoy el nivel de ocupación se situaba en el 80 % y se espera que aumente a medida que avanza el verano y, con él, el año Xacobeo.

---

---