Los cámpings de Barbanza triunfan y esperan un agosto soleado para romper récords
VEN A GALICIA
Buena parte de los establecimientos rozarán el lleno durante el puente del Apóstol
22 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Si por algo se caracteriza la oferta de alojamientos turísticos de Barbanza es por la falta endémica de plazas de hotel, que choca frontalmente con las múltiples opciones en lo que se refiere a esa otra que unen los cámpings con la naturaleza y la tranquilidad. Ahí la zona destaca y saca nota, o al menos así lo demuestra la ocupación que estos establecimiento vienen registrado durante el verano. La temporada está siendo más que aceptable, pero los profesionales consultados esperan que un agosto soleado les permita romper récords.
«Levamos un mes bastante positivo. O ano pasado en xullo estivo chovendo e este ano é mellor. Pero o último agosto foi de récord e este ano, se o tempo o permite, esperamos repetir os resultados ou melloralos». El que habla es Anxo Rodríguez, del Cámping Ría de Arosa, con instalaciones en la parroquia ribeirense de Oleiros y en la playa pobrense de Cabío: «Vemos que se está consolidando o traballo conxunto entre as Administracións e o empresariado. Hai máis alicientes para visitar a comarca, máis actividades náuticas e de ocio, e iso supón un despegue importante dos clientes. A xente ten ganas de saír e pasalo ben».
En la misma línea se expresa Sara Vinagre, gerente del Cámping Cabeiro, en Porto do Son, otro de los más visitados de la comarca. Reconoce que están teniendo «unas cifras bastante buenas, la verdad». Sobre el récord que se podría alcanzar en agosto, recuerda que «dependerá del tiempo. Si está nublado la gente se priva». Afirma que actualmente están a un 75 % de ocupación, pero para el puente del Apóstol se espera que se roce el lleno: «Contamos con que esos días la gente venga a pasar unos días en la playa».
Norte de la comarca
La situación es similar en los municipios del norte de la ría de Muros-Noia. Así lo asegura Rosa Figueroa, jefa de recepción del Cámping San Francisco, en Muros: «Este fin de semana espérase moita xente, é o Castelo Rock e hai moita reserva de xente moza. Esta sendo un mes bo».
Sobre las previsiones para agosto, afirma que «aínda non hai reservas. A xente espera para facelo, pero a primeira quincena sempre adoita ser boa, pero claro, dependemos do tempo. A segunda xa é diferente, polo menos por esta zona». En el vecino cámping de Ancoradoiro, uno de sus responsables, Marcos Heinrich, destaca que «aunque parece que la temporada está arrancando bien, trabajamos sin reservas, por lo que no sabemos qué va a ocurrir».
Joaquín Santos, en el cámping de Coroso, otro de los más destacados de la comarca, espera «completar para a ponte do Apóstol. O ritmo de reservas para agosto é moi bo, vese unha recuperación clara dende o parón polo covid e esperemos que siga así». Afirma que el sector ha superado «unha travesía polo deserto e este verán, se o tempo acompaña e a tendencia se mantén, podemos comezar a superar isto». Así lo espera y desea un sector clave para el alojamiento en Barbanza.
Desde jubilados llegados del norte de Europa, a jóvenes y familias que buscan desconectar
La clientela de los cámpings barbanzanos es tan variada como lo es su oferta. Es Rosa Figueroa, del de San Francisco, la que esboza el tipo de personas que llegan a Muros: «En xuño o que máis temos son xubilados do norte de Europa, sexa Francia, Holanda ou Alemaña. Veñen en caravanas mentres viaxan por todo o país».
En las primeras semanas de julio, la clientela cambia y se nota con la llegada de «mozos chegados do interior de Galicia que veñen ás festas que hai na zona e tamén a desconectar e ir á praia». En otros, como los ubicados en Coroso, A Pobra o Oleiros, también hay gente de todo tipo, desde familias a jóvenes con ganas de pasar un fin de semana.
Fiestas como la Dorna motivan la llegada de gente joven, mientras que los establecimientos que se encuentran más separados de los núcleos urbanos cuentan con más familias que quieren escapar del mundanal ruido para dejarse llevar por la tranquilidad y el relax que caracteriza a los cámpings barbanzanos.
Las estancias son más cortas y se gasta menos
Aunque se espera que el verano sea bueno, responsables de los cámpings reconocen que sus clientes también están controlando sus gastos. La inflación, por ende, no les es ajena. «Vemos que as estancias están sendo un pouco máis curtas en comparación con outros anos», afirma Rosa Riguera, del establecimiento de San Francisco. Es Anxo Rodríguez el que confirma que «notamos menos gasto na clientela. Entre semana os nosos centros están máis parados». El motivo, un constante aumento de precios que no deja a nadie atrás.
Recurso único
Por sus ubicaciones y características, los cámpings de Barbanza son una joya para cualquier visitante que quiera conocer la comarca. Ubicados en parajes únicos, la buena gestión que han hecho sus profesionales les han permitido colarse entre los mejores de Galicia. Es por ello que familias enteras llevan años veraneando en ellos, aunque los nuevos clientes también siguen llegando. En ellos está parte del sostén que debe ayudar a Barbanza para que el turismo siga creciendo y creando riqueza.