Turismo a toda costa | El Concello promueve itinerarios que transitan por el mirador da Pedra da Ra y el castro de A Cidade para ensalzar un entorno natural y arqueológico de gran valor
09 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello de Ribeira ofrece, durante las mañanas de los viernes de agosto y septiembre, visitas guiadas a la Pedra da Ra y el castro de A Cidade. El objetivo es, de una forma entretenida, dar a conocer entre vecinos y visitantes el pasado histórico de este enclave y ensalzar la belleza de su entorno natural y el valor de su pasado arqueológico.
Partiendo del mirador, el recorrido guía a sus participantes por la cima del monte, desde donde se puede apreciar como se funde el horizonte en el océano Atlántico. Este mirador lleva en funcionamiento desde los años 80, aunque fue reformado en el 2015 por el arquitecto Carlos Seoane para hacerlo más respetuoso con el entorno que lo rodea, eliminando una escalera que llevaba a los visitantes a lo alto de la piedra.
Además de las vistas al océano que hay desde el enclave, también destaca la panorámica que se puede contemplar de cuatro islas gallegas: Sálvora, Ons, Cíes y Cortegada. De estas, la única que tiene habitantes es Ons, mientras que las otras han terminado convirtiéndose en puntos para visitas turísticas y espacios sin aldeas habitadas.
La isla de Sálvora
El territorio que más destaca por su historia y leyenda es la isla de Sálvora, para la cual también se están organizando visitas guiadas. Deshabitada desde los años 70, es conocida por la participación que tuvieron sus antiguos habitantes para salvar a la gente del naufragio del buque de vapor Santa Isabel en el 1921.
Debido a la desorientación del capitán, el «Titanic gallego» se hundió cerca de la isla de Sálvora el 1 de enero de hace 101 años. Ese día, en el territorio solo había mujeres y ancianos, ya que los hombres estaban en la península celebrando la Nochebuena. Fue así como cuatro mujeres salieron en sus dornas a ayudar a los náufragos del buque consiguiendo salvar a 53 personas de las 266 que iban a bordo.
Estas cuatro mujeres fueron galardonadas con la medalla de Salvamento Marítimo y en la isla se las recuerda con un hórreo para cada una. Sin embargo, hay un quinto que está dedicado al segundo capitán, Luis Cebreiro, que sacrificó su vida para que uno de los botes salvavidas llegase a la costa, convirtiéndose él también en leyenda.
La fortaleza
La segunda parada del itinerario es el castro da Cidade, un asentamiento humano que fue habitado hace 2.500 años. Este sigue siendo estudiado por los arqueólogos y continúa escondiendo muchos misterios, entre ellos cuál era la entrada original a esta fortificación del 700 antes de Cristo.
Desde el Concello se insiste en que se tenga mucho cuidado con la preservación de este lugar, ya que cualquier manipulación de los elementos del entorno, sobre todo piedras, puede provocar confusiones entre las personas encargadas de estudiarlas. Entre los participantes que han podido disfrutar de estos itinerarios, este tipo de actividades son las que necesitan para poder conocer un poco más de la zona, e ir más allá de lo que el sentido de la vista les dice.
Para poder disfrutar de estos recorridos es necesario inscribirse previamente en la oficina de turismo de Ribeira, de forma que para los técnicos sea posible gestionar los grupos de gente que participan. Además, hay que destacar que se está ofreciendo una segunda ruta por el parque de San Roque que tiene lugar los martes por la mañana y que permite conocer interesantes espacios de la capital de Barbanza.