Es ya uno de los eventos clásicos de la Festa do Albariño
10 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.La XI edición del Túnel do Viño, organizada por el Consello Regulador Rías Baixas, se mantiene como uno de los platos fuertes de la LXX Festa do Albariño en Cambados. Este evento se convirtió en uno de los grandes éxitos de la pasada edición, con la participación de más de 400 personas, las cuales se acercaron entre el jueves 4 y el sábado, 6 de agosto, al Salón de Congresos y Exposiciones José Peña. Y es que aunque este evento tuviera un precio de quince euros por persona, el viernes por la tarde, incluso se tuvo que colgar el cartel de «aforo completo». En estas jornadas, el público pudo degustar algunas de las 153 marcas de las 54 bodegas expositoras. Unos vinos afrutados, muy caracterizados por tener una menor graduación alcohólica.
La directora del Departamento de Márketing del Consello, Eva Mínguez, mostró su satisfacción por la respuesta del público; «estamos contentos por la buena acogida que ha tenido esta actividad entre el público. Ello pone de manifiesto el interés que despiertan los vinos de Rías Baixas entre el consumidor, que cada vez quiere conocer más sobre esta denominación».
En cuanto a la XXXIV Cata Concurso Rías Baixas Albariño, se erigió como otro de los momentos más destacados del fin de semana del Albariño. En esta actividad, se decidió cuáles eran los mejores albariños de la añada 2021; la medalla de oro se la llevó Davide, de enoturismo Acha; la de plata fue para Castel de Fornos, de Bodegas Chaves; y la de bronce para Veiga da Princesa, cuya bodega porta el mismo nombre. Aunque al podio solo se puedan llegar tres albariños, en el concurso participaron 53 marcas, que fueron analizadas por 24 expertos.
Un proceso largo que los catadores han destacado por su «buena organización». En la primera fase del concurso (la cata prima), se hizo la selección de los doce finalistas. Ya después en la cata derradeira, y según Patricia Regidor, sumiller de Castilla y León y Silvia García, sumiller del restaurante Quique, resultó la prueba «más difícil, ya que las diferencias no eran muy grandes».