El menú del día en Vilanova: más de 400 kilos de mejillones y 200 de berberechos

Ayer por la mañana, el centro de Vilanova era un ir y venir de personas entre la plaza del Concello y el Xardín Umbrío. Y es que entre la Festa do Mexillón e o Berberecho, la feria de oportunidades e, incluso, el mercado local, los vecinos y visitantes de la villa arousana tenían a pie de calle toda una variedad de productos para ver y comprar.

Sobre las doce y media del mediodía, la mayor parte del bullicio estaba ubicado en la feria de oportunidades, observando los veinte puestos que conforman esta edición, que ya es la décimo octava del municipio. Ayer fue el primer día de la feria y estará abierta hasta mañana, en horario de diez de la mañana a once de la noche. Algunos comercios estaban más llenos que otros, pero era inevitable no realizar una parada en cada uno para echar, por lo menos, un vistazo. Entre los productos ofrecidos había ropa, calzado, bisutería y un puesto de botánica.

Elisabeth Sanabria, de la tienda de ropa Morena Rose Vintage, se mostraba muy satisfecha con el comienzo de la feria: «Estamos empezado bastante bien por lo que veo». Este es su segundo año, habiendo sido el 2021 el primero, y que dice que fue muy bueno, por lo que espera que este siga la misma línea. Ana María Fernández, de El Perchero de Ana, mantiene las mismas expectativas: «El año pasado fue muy buen año y este parece que igual. La gente viene con muchas ganas de comprar y la verdad es que estoy muy contenta con las ventas, están yendo genial». Teniendo en cuenta que los puestos abrieron a las diez de la mañana, estas declaraciones dos horas y media después prometen un próspero fin de semana para los negocios.

Paralelamente a la feria, en el Xardín Umbrío se abría la cocina de la carpa de A Festa do Mexillón e o Berberecho. Sin embargo, no fue hasta pasada la una cuando la gente comenzó a ocupar las mesas. Alejandra Salinas, jefa de la pulpería cátering Alejandra Salinas, empresa responsable de la comida, comentó que para ayer contaban con «más de cuatrocientos kilos de mejillones y doscientos de berberechos», todo ello para servir a una previsión de mil quinientas personas a lo largo de toda la jornada.

La cocina abre de doce y media del mediodía a cuatro y media de la tarde, y de siete y media a cierre, y entre los platos ofrecidos, además de los elaborados con los dos protagonistas, hay paella de marisco, empanada de choco y pulpo á feira. Se aguarda que los cuatro días de fiesta sean un no parar, pues la jefa de cocina comentó que el primer día de la celebración, el jueves, las cifras de clientes superaron a las del 2019 y «eso significa que la fiesta va creciendo cada año», remarcó Salinas.

Entre la fiesta gastronómica y la feria, Vilanova ya tiene este fin de semana el cupo de ocio lleno para sus turistas y vecinos.

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