La Festa da Malla tradicional de Doade estrenó la distinción de interés turístico de Galicia
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La ancestral técnica con la que se golpea el cereal con un utensilio de madera para separar el grano de paja tuvo su día de exaltación ayer en Doade (Lalín). La malla tradicional celebró su edición número treinta y dos estrenando la distinción de interés turístico de Galicia, concedida en mayo, y regresando tras un parón de dos años a causa de la pandemia. Aunque en el anterior se realizó con mascarilla y emitida por Youtube, fue ayer cuando recuperó la vitalidad de antaño y congregó a centenares de personas.
Un homenaje a la tradición y a la cultura agrícola de la comarca que estuvo marcado por el típico «carrexo de mollos» tirados por vacas del país; la clásica malla a la piedra, con males, manual y también con motor y tractor. Una exhibición que terminó con el premio a los mejores vestidos de época.
Nada como la gastronomía y la música para poner la guinda a un regreso esperado. El xantar popular con pulpeiro fue coronado con la octava edición del Serán da Malla, cambiando las fouces y la trilla por las pandeiretas y gaitas. A Xariza de Parada, Os Dezas de Moneixas, O Carballo da Manteiga, Amigos do Acordeón Terras de Celanova, Ailola de Lalín y Os Trasnos de Doade amenizaron los festejos y sirvieron de teloneros para el concierto de Cantos da Terra de O Salnés.