El barrio fue escenario de una ruta teatralizada y de un mercado popular
12 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Después del lleno que experimentaron sus calles el primer fin de semana de septiembre, con la fiesta de arte urbano Las Meninas, Canido se resiste a bajar el nivel. Ayer, el barrio, en el marco del proyecto Canido en nomes, registró una ruta teatralizada, en la que distintos lugares emblemáticos sirvieron de escenario para rememorar costumbres tradicionales ya en desuso, que formaron parte de la historia de la zona y de la ciudad. Además, en el entorno de la plaza Fernando Miramontes se llevó a cabo también un mercado popular —el último de este año— en el que los vecinos pudieron vender artículos de segunda mano y en el que diversos artesanos mostraron sus productos.
El proyecto Canido en nomes —que tiene por objetivo poner en valor el pasado del barrio a través del estudio de su patrimonio— está impulsado por la asociación de vecinos, la asociación Muíño do Vento, la Asociación de Acordeonistas Canido-Ferrol y la entidad Ferrolterra Antiga, en colaboración con la Concellería de Patrimonio del Concello ferrolano.
La ruta teatralizada se inició a las once de la mañana, con las explicaciones que fueron dando los historiadores sobre los nombres de las calles y también destacadas personalidades que vivieron en la zona. El Concello colocó hace meses unas chapas en distintas vías con un código QR para que todas aquellas personas que lo deseen puedan conocer más sobre esta iniciativa a través de la página web, distintivos que se irán haciendo extensivos a otras calles.
Posteriormente, en colaboración con los grupos de teatro de Muíño do Vento y de la sociedad Canido, además de los integrantes de Donas e Galáns, representaron tres escenas en el lavadero de Insua, en la puerta de Canido —en donde antiguamente había que pagar por pasar— y en la calle Coruña, por donde subían las comitivas funerarias hasta el cementerio de la zona.
«O obxectivo é a dinamización do barrio, facer accións para que non só estea vivo en datas puntuais», asegura Roberto Taboada, presidente de la asociación de vecinos.
La confluencia de ambas iniciativas y el buen tiempo reinante propició que el barrio volviese a ser un hervidero de personas que disfrutaron de las actividades al aire libre, en las que tampoco faltó la música de Marcos Mella y de un gaiteiro.