GastroMar, la feria más anhelada en Ribeira, agotó existencias y ya mira al futuro
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La puesta en escena y las elaboraciones con la profesionalidad de Restauración Chicolino, claves en el éxito del evento
13 sep 2022 . Actualizado a las 04:49 h.Desde hace años, distintos ámbitos sociales de Ribeira insistían en la necesidad de que se estableciera algún tipo de evento que promocionase el pescado que captura la flota local, y si es cierto que han sido variados los intentos de promover y asentar certámenes, liderados por entidades como Amas de Casa o la Cofradía de Pescadores, no es menos cierto que se quedaron todos en el camino, y mientras Ribeira vivía ajeno a su condición de principal puerto de pesca de litoral de Galicia, otras poblaciones con menos méritos en el ámbito extractivo avanzaban en la consolidación de marcas propias.
La feria GastroMar promovida por la Asociación de Empresarios de Ribeira, que se ha desarrollado entre la tarde del sábado y el mediodía de ayer, ha demostrado que la implantación de otra fiesta gastronómica en el calendario de Galicia es posible, como había sugerido la conselleira de Mar, Rosa Quintana, el sábado, con motivo de la inauguración.
GastroMar llegó ayer a su fin y hay un dato muy relevante: se agotaron las existencias. Demuestra que el certamen tiene futuro, siempre y cuando se apuesta por él. Se unieron para firmar el éxito las cofradías de Ribeira y Aguiño, la organización de mejilloneros Opemar, el Concello de Ribeira, la Consellería do Mar y el hostelero local A Caseira. Contaron con la aportación profesional de un grupo hostelero con solera, restauración Chicolino, cuya cuidada puesta en escena corrió por su cuenta, así como la elaboración de los platos con pescados de Ribeira, en food trucks, vehículos en los que se daba el último toque a los platos para que los asistentes los disfrutasen en todo su esplendor.
Concurrencia
Según fuentes de la organización, durante los días de actividad de GastroMar, pasaron por el recinto cerca de dos mil personas, y fue especial la afluencia de ayer, ya que, influenciada por la condición de festivo en Ribeira, acabó siendo mayor de la esperada y copó el recinto habilitado en la plaza de España, desde su apertura hasta el cierre.
Al tratarse de la primera edición, las cantidades de producto no alcanzaron la demanda, motivo por el que la organización ha pedido disculpas a quienes no tuvieron la opción de degustar la variedad de elaborados que salía de las seis cocinas móviles.
El presidente de la patronal ribeirense, Francisco Martínez, confirmó el éxito de GastroMar, lo que avala su continuidad «corrigiendo errores y tomando nota para mejorar». El alcalde de Ribeira, Manuel Ruiz, también se declaró satisfecho y retó a la organización a avanzar en la promoción del pescado de Ribeira, citando potencialidades de especies menos valoradas, pero de alta calidad, como el lirio.
Por su parte, Arturo Fajardo, responsable de Restauración Chicolino, explicó que la puesta en escena de la feria del pescado de Ribeira fue como una prueba que, en vista de lo bien que ha funcionado, probablemente extienda a otros eventos gastronómicos. Además de una decoración acorde con el contenido de la promoción, cocineros de la plantilla se esmeraron a la hora de preparar platos en directo con pescados de la flota de Ribeira, como la bacaladilla, la xarda, el congrio y otros, que no tienen tanto valor en las ventas, pero sin embargo cuentan con las mejores vitaminas y sabores.