El Restaurante Cuatro Perras las ofrece muy elaboradas el domingo por la noche, y la clientela responde, agotando existencias cada semana
02 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Los domingos en Corcubión son días de veneración. Por las mañanas es San Marcos el que personaliza los deseos de sus feligreses, mientras que por la noche son las hamburguesas del Restaurante Cuatro Perras las que compensan la peregrinación de los más devotos. Un pecado carnal que ya se ha convertido en religión para las decenas de clientes que siguen acudiendo al local ubicado en la Praia de Quenxe una vez pasado el verano.
«En el Calma Chicha —Bar que regentaban anteriormente en Fisterra— teníamos hamburguesas artesanas y durante la pandemia las servíamos a domicilio, así que cuando abrimos mucha gente nos preguntaba. Queríamos ofrecerlas, pero no todos los días, porque queríamos que significasen algo especial y no fuese algo rutinario, así que optamos por servirlas solo el domingo por la noche», cuenta Carlos Lestón, que dirige el restaurante junto a las hermanas Castiñeira, Alba y Aroa, su mujer. Se pusieron manos a la obra a principios de abril, cuando cumplían un año de vida, y el éxito fue inmediato. Calidad y variedad definen su propuesta, pues además de preocuparse por conseguir el mejor producto, logran distintos toques exóticos que están presentes en toda su carta gracias a la originalidad de Alba en la cocina. A la clientela le enganchó esa mezcla de sabores y la oportunidad de degustar al lado de casa unos platos más propios de las grandes cadenas como el Goiko o La Pepita.
El verano, a tope
«El ritmo de julio y agosto fue totalmente insospechado, no dábamos para más», indica Carlos, que ya se había sorprendido con la asistencia que habían tenido durante los primeros domingos. Con el objetivo de facilitar el trabajo, intentan elaborar una cantidad estimada de hamburguesas durante la tarde del domingo, pero a menudo agotan existencias. «En primavera y ahora solemos hacer unas 70, pero en esos meses creábamos más de 170 y pronto las agotábamos», señala sobre los meses de verano. Y eso que no sirven a domicilio, aunque sí se pueden ir a recoger. Simplemente, y aunque ellos no lo deseaban al principio, han convertido su propuesta en una rutina: la de ir todos los domingos por la noche a cenar al Cuatro Perras. No siempre la misma, pues la carta va rotando para ofrecer siempre cinco opciones. «Mola ver que siempre hay las mismas mesas, es como su momento de la semana para estar juntos y optan por venir aquí», dice Carlos. El domingo, día de devotos.
A LA CARTA
Calma Chicha. Pollo rebozado en maíz, cheddar, canónigos, manzana y salsa curry (9 euros).
Cuarto de kilo. Doble de vaca, cheddar, pepino encurtido y salsa casera (9 euros).
Madurita. Carne de vaca vieja madurada, queso de Arzúa y yema de huevo curada (12 euros).
Yavesprimo. Carne de vaca rubia gallega madurada, bacon, Relish de pepinillo y cebolla roja (15 euros).
Combi Completa. Carne de vaca vieja, cheddar curado, yema de huevo y puntilla, lechuga hoja de roble y mermelada de tomate madurada (15 euros).
*Cada domingo rotan y aparecen nuevas creaciones.