En el centro de la ciudad se pueden degustar los dulces clásicos en dos locales especializados y en algunas cafeterías
04 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El San Froilán de Lugo es sinónimo de pulpo, barracas y conciertos. Pero para algunos también de algodón de azúcar, garrapiñadas o churros. Los amantes de estos últimos si quieren degustarlos dentro del recinto ferial, podrán hacerlo al inicio de Rodríguez Mourelo o en las inmediaciones del pabellón, pues son los dos lugares en los que la churrería que pujó 82.000 euros por los puestos se ha instalado. Pero más allá de las churrerías portátiles, en la capital lucense hay dos lugares de referencia para degustar el clásico dulce: Os Pepes y La Modernita.
En la calle Montevideo se encuentra Os Pepes, una churrería regentada desde el año 2008 por una familia de emigrantes cubanos. Aunque generalmente los domingos es su día de descanso, durante el San Froilán harán una excepción y abrirán a diario para desayunos y meriendas. Desde las 8 de la mañana a las 2 de la tarde y desde las 5 a las 9 se podrán degustar churros recién hechos, puesto que, como recuerda Jaime Castro, «freímos todo el día». Así, el producto está siempre recién hecho.
La docena de churros en Os Pepes se despacha a 3,60 euros y la media cuesta 1,80. La unidad, suelta, vale 0,30; y para los más golosos siempre está la opción de los bañados en chocolate, cuyo precio unitario es de 40 céntimos. Para acompañarlos, el negocio ofrece cafés o chocolates, algunos de ellos más especiales. «Además del chocolate de toda la vida, los ofrecemos con nata, leche condensada o helado», explican.
La otra churrería de referencia de la ciudad, y también dentro de murallas, es La Modernita, un clásico del mercado de Quiroga Ballesteros que abre de lunes a sábado en horario de 7 de la mañana a 3 de la tarde. En su caso, al no abrir los festivos, no se podrá degustar su repostería ni el día de San Froilán ni el del Pilar, ni el Domingo das Mozas.
En el establecimiento del mercado de abastos uno puede degustar una docena de churros por 1,80 euros si se consumen allí o a 2 euros si son para llevar. La media docena se despacha a 90 céntimos en el lugar y a 1 euro en formato take away. La unidad saldría a 15 céntimos, y puede acompañarse de cafés o de sus míticos chocolates.
Más allá de los dos negocios especializados, en la ciudad también hay cafeterías en las que se pueden consumir churros y chocolate. En la Praza Maior o en la rúa de San Pedro se pueden encontrar, por ejemplo.
Los que prefieran no salir del recinto del ferial y comer los churros en los puestos temporales podrán disfrutarlos recién hechos al precio de 2,50 euros la media docena y a 5 la completa. Además, también despachan los míticos churros bañados en chocolate.