Vecinos de la localidad recrearon un pisado de uvas y prensado tradicional
10 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.La alcaldesa de Oímbra, Ana Villarino, se mostraba satisfecha con la respuesta del público a la tercera edición de la recreación del prensado del vino en lagares rupestres. «Estamos moi contentos. Esta terceira edición é un novo comezo para esta cita coa que queremos invitar á xente a coñecer o noso patrimonio», apuntó la regidora, que recordó que el covid frenó esta iniciativa cuando empezaba a ser conocida. Este año, la convocatoria reunió a cerca de doscientas personas en este municipio ourensano para disfrutar de esa representación en la que un grupo de vecinos (entre ellos la propia alcaldesa), vestidos para la ocasión como lo harían los labriegos de antaño, participaban en el pisado y el prensado de las uvas en el lagar de Xan Preto, en el que se ha reconstruido una prensa. Luego, recogieron el mosto y lo depositaron en barricas que trasladó un carro de madera tirado por un mulo hasta la bodega As Barrocas, que data del siglo XVIII. Allí se puso, con unos pinchos, el broche final a esta jornada que pretende unir dos de los principales recursos del municipio: el vino y el patrimonio etnográfico, ya que Oímbra es el territorio gallego con más lagares rupestres. Tienen una treintena localizados e identificados que dan buena cuenta de la vinculación de este concello con la viticultura. De hecho, en él se concentran ocho de las 28 bodegas que integran la Denominación de Origen Monterrei, de la que forman parte.
Durante la recreación de este domingo, varios extras ayudaron a crear ambiente. Entre ellos, la compañía teatral Viravolta Títeres que representaron la obra «Cómicos de Lengua na Raía Seca» un espectáculo ambientado también en la época medieval que forma parte del programa O teu Xacobeo, de la Xunta. Los actores no dudaron en sumarse a la comitiva de los vecinos que trabajaron en el pisado, prensado y traslado de las uvas, ampliando así la recreación. Pero también se unieron a la cita dos integrantes del grupo Sustinea, que se hacían pasar por dos jóvenes llegadas de París.