Patrocinado por

«Cada vez somos máis no monte á procura de cogomelos»

Patricia Blanco
PATRICIA BLANCO CARBALLO / LA VOZ

VEN A GALICIA

Juan Carlos Lauroba, técnico de la oficina agraria de Baio, en una imagen de archivo
Juan Carlos Lauroba, técnico de la oficina agraria de Baio, en una imagen de archivo Ana Garcia

GENTES DEL FINIS TERRAE | En plena temporada de setas, y tras estas últimas lluvias, micólogos, guías y aficionados ofrecen algunas claves

26 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace ya semanas que en la Costa da Morte se vienen sucediendo con éxito jornadas micológicas. En Carballo, en Laxe, en Vimianzo... Delatan una afición que va a más, y que constatan expertos, guías y aficionados. Bien puede ser, como se tiene dicho, motor de desestacionalización del turismo, porque potencial y variedad de especies hay «moitísima». Octubre arrancó con sequía y, como decía entonces José Manuel Castro Marcote desde la entidad Pan de Raposo, eso afecta, porque las setas son «90 % auga». En aquella primera salida promovida por Lumieira aún hallaban alguna de verano, si bien tras las últimas lluvias, señala Juan Carlos Lauroba, otro habitual conferenciante en las jornadas, «o groso das setas está saíndo agora».

Primer día de las Xornadas de Lumiera, el 8 de octubre. Asesoró Castro Marcote
Primer día de las Xornadas de Lumiera, el 8 de octubre. Asesoró Castro Marcote BASILIO BELLO

No es bueno ni lo poco ni lo mucho: «Esta chuvia estimula a saída, pero pérdense ou agusánanse axiña, caso dos níscalos». Las temperaturas de este otoño son más elevadas y no se ve tanto esa aparición escalonada de otros años: «Os níscalos están vindo con retraso, e ata as macrolepiotas, que son das primeiras en saír. Doutro lado, xa teño atopado algunha lingua de vaca, que é de pleno inverno. É complexo. Os cogomelos son dos seres vivos máis sensibles ás precipitacións», indica el docente y exalcalde coristanqués Amancio Lavandeira. Hace años que la micología es una de sus «paixóns».

Amancio Lavandeira, a la derecha
Amancio Lavandeira, a la derecha JOSE MANUEL CASAL

Dar a conocer la variedad es el sustento de iniciativas como Carballo Micolóxico, impulsada por el Concello de Carballo recientemente y que quieren asentar en el tiempo, incluso «descentralizándoa»: «A intención non é recoller un cesto de níscalos ou de boletus senón poder ver todo o que hai», dijo Santiago Andrade, técnico de Medio Ambiente, en Radio Voz. «Desafortunadamente, é moi difícil encontrar xa carballeiras ou soutos no medio dos eucaliptos», valoró. Ellos eligieron una zona colindante en el monte de Rus, donde queda masa de caducifolias, y hallaron 74 especies. «Nunha superficie pequena podes encontralas variadas, comestibles e non comestibles, e incluso tóxicas e mortais, como a amanita faloides. É importante coñecelas, para que a xente teña precaución», incide Lauroba. Siempre este mensaje: solo coger aquello de lo que se esté seguro.

Las condiciones de terreno son buenas en la Costa da Morte —con sus variaciones de litoral a interior—, pero el eucalipto no favorece ni la implantación ni la persistencia de las setas. Lugo y Ourense y el interior de las provincias de A Coruña y Pontevedra ofrecen por ello condiciones incluso más favorables, con «frondosas e pastos que non se renovan tanto», reseña Lauroba, que recuerda que las setas no son solo de ámbito forestal, sino también de «pradeiras». «Cada vez somos máis no monte á procura de cogomelos, ves máis xente cunha cesta, antes eramos poucos e os que estaban no monte podía ser máis ben por caza. Isto vai a máis, como a bicicleta», apunta.

La mayoría, con fines culinarios, cree, más que para fotografía o estudio, que puede ser. O incluso para «pasear, percorrer o bosque, facer exercicio». Juan Carlos incide en el cada vez mayor aprecio gastronómico de estos manjares: «Hoxe é difícil atopar un restaurante que non teña na carta un prato con setas. Unhas croquetas de boletus, uns níscalos con carne...»: lo atribuye a una cocina que se ha ido diversificando y al auge de la micología, como acredita «que haxa xornadas de iniciación e divulgación en case todos os concellos». En Carballo Micolóxico innovaron dando a conocer las setas de cultivo, el shiitake, con el método tradicional japonés, porque quería inculcar la importancia del «respecto pola natureza». Es el mensaje que lanza Juan Carlos: «O que se quere é que a xente disfrute saíndo ao monte, pero pensando que ten que ser unha actividade sostible. Non recoller setas que non se vaia comer ou clasificar». Sin patadas, sin destruir su hábitat, con cuidado para que de un año a otro se conserven ejemplares, como reflexiona Lavandeira: «Por esta época de defuntos saen as chamadas trompetas da morte. O primeiro ano que as vin había un montón, pero van a menos».

BASILIO BELLO

AL MENOS TRES CITAS MUY PRÓXIMAS 

Este sábado, en Cerceda, con teoría de 10.00 a 11.30 en el vivero de empresas y posterior salida al campo. A Laracha acogerá el domingo la 9.ª edición de «As setas da Laracha»: quedada a las 09.30 en Gabenlle. Habrá salida, clasificación y charla de la guía Raquel Poncini en la Casa da Cultura (12.30). Finalmente, en Carballo, exposición el domingo en la feria, con Lumieira.