Loureiro, en Bueu; Sabino, en Sanxenxo, Loaira y A Ultramar están incluidos en la guía gastronómica por su buena mesa
23 nov 2022 . Actualizado a las 20:11 h.Este martes se celebra la gala de la Guía Michelin en Toledo y los restaurantes con una estrella o que obtengan la segunda darán un paso al frente en popularidad. Pero esta guía, que nació como una hoja de ruta de servicios, se ha convertido en una especie de biblia para los amantes del buen comer. Y no hace falta ser uno de los cocineros del firmamento gastronómico para aparecer como un restaurante que merece un alto en el camino. La comarca de Pontevedra tiene tres cocineros con estrella: Pepe Vieira y Pepe Solla, en Poio, y O Eirado da Leña, en Pontevedra, pero hay mucho más dentro de la guía, algunos de ellos con el sello de los mismos cocineros.
Iñaki Bretal sirve su menú con estrella en O Eirado, pero en la misma plaza de la Leña abre cada día el Loaira.En la Guía Michelin se refieren a él como un «gastrobar dotado con una pequeña barra y un salón tipo bistró en el piso superior. Platos actuales de base regional, idóneos para compartir. ¡Atractiva terraza en plena plaza!», pero para los clientes es un lugar de tapas a precios más asequibles. Iñaki Bretal abrió este local seis años después de abrir O Eirado para no desperdiciar una oportunidad de crecer en la misma plaza. Aunque tienen distinta apuesta gastronómica, mantiene la misma implicación de su chef. Entre las recomendaciones de estos días, podría estar cualquier marisco de concha, como las volandeiras, croquetas de centolla y un arroz negro de luras y alioli. Su precio medio por persona rondaría los 25 euros y comparte la terraza con O Eirado. Lo único que ya no tienen es el menú del día. «Non ten rentabilidade, este tipo de oferta funciona se tes un local moi grande», explica Bretal.
A pocos metros de él, junto al edificio Castelo, del Museo de Pontevedra, abre su puerta A Ultramar, una «taberna» que inauguró Pepe Vieria en el 2015 y donde se puede comer por un precio por persona que ronda los 30 euros. Es una mezcla de cocina tradicional e innovadora en la que se puede degustar desde tacos mexicanos con costilla de cerdo, un arroz seco o un bogavante asado con costilla de cerdo, sin faltar uno de los platos más exitosos que se sirve desde el primer día, los calamares en pan de leña con ajo negro y piel de lima por 12,90 euros. Ellos se autodefinen en su web como una taberna de estética desenfadada con un menú de ultramar, que bebe de la cultura de otros países. Para los responsables de la guía es un local «canalla».
Fuera ya de la ciudad de Pontevedra, la Guía Michelin recomienda el Sabino, en Sanxenxo, y Loureiro, en Bueu. Este último lleva ya un par de décadas entre los favoritos para hacer un alto en el camino. ¿Cuál es su secreto? El dueño de este restaurante sobre la playa del mismo nombre, Manuel Martínez, cree que es resultado a una trayectoria que empezó hace más de medio siglo. «Tenemos una buena relación calidad precio, se puede venir a comer y pagar entre 25 y 50 euros, aunque varía en función de la bebida y el menú», explica su responsable, que reconoce que aparecer en la guía le acerca a nuevos clientes cada año: «Existe una cultura de la Guía Michelin, hay quien no se fija en otras recomendaciones y sigue lo que se marca en esta». Manuel, además de hostelero, es una de esas personas que diseñan un viaje pensando también en los puntos de interés gastronómico. «Existen muchas persona que se desplazan hasta cien kilómetros para poder comer bien», señala. Empezada ya la temporada de la centolla, Manuel Martínez la incluiría entre sus recomendaciones, pero la completaría con una palometa roja al horno, un mero o chipirones encebollados regados con un buen albariño. Eso sí, al llegar la factura, se superarían los 60 euros.
Para conocer la otra propuesta de la Guía habría que cruzar al otro lado de la ría. En Sanxenxo recomiendan el restaurante Sabino, un local familiar próximo a la playa de Silgar, que se ha convertido en un referente gastronómico en la capital turística de las Rías Baixas y en el 2017 es uno de sus favoritos. «La gente sigue las recomendaciones, pero nuestro público es gente que veranea aquí y los del pueblo. Cuando vienen con la guía se nota porque siempre te preguntan qué le recomiendas y quieren más sorpresas», explica Sabino Montes, actual dueño e hijo del fundador. Estos días permanece cerrado por vacaciones, pero Michelin destaca de su carta la cocina tradicional. Volverán el día 30 de noviembre a trabajar. Para esas fechas Montes recomienda cualquier plato con centolla, la protagonista de esta temporada, y un pescado del día. El precio medio por comensal alcanza los 40 euros sin vino.
Estos son los cuatro restaurantes que recomienda la guía para comer bien, sin pagar el precio de un estrella Michelin. Salvo que esta noche haya cambios en la gala que se celebra en Toledo, los cocineros de la comarca de Pontevedra cuentan con una cada uno de ellos.