El mediático chef británico alabó en sus redes su paso por los restaurantes compostelanos Abastos 2.0 y A Maceta, donde destacan su cercanía
29 nov 2022 . Actualizado a las 15:22 h.El viernes por la noche, horas antes de que el mediático chef británico Gordon Ramsay, que llegó a tener 17 estrellas Michelin —de las que conserva actualmente siete en algunos de sus establecimientos —. se acercase a la Praza de Abastos de Santiago para el rodaje de su programa Road Trip, cenó en sus inmediaciones, en el conocido restaurante Abastos 2.0. «Fue una sorpresa. No lo sabíamos. Estaba hecha una reserva, pero nunca nos imaginamos que sería él», reconoce Luis Rojas, jefe de cocina del prestigioso establecimiento. «Justo coincidía que estaban echando en la tele el Inglaterra-Estados Unidos. Tras saludar, pidieron unas cañas, mientras seguían el partido», destaca, aludiendo tanto al cocinero como a alguno de sus compañeros de rodaje, Gino D’Acampo y Fred Sirieix.
«No se preparó nada especial. Tomó el menú normal, algo que creo que ellos también agradecen», reflexiona Rojas recordando que, entre otros platos, disfrutaron de navajas, sashimi de lubina o caballa. «Cuando lo vi entrar, no niego la presión, pero, cuando ves que actúa con tanta naturalidad, te relajas. Luego se acercó a la cocina a felicitarnos a todos por la comida. Ahí notas que le gustó», incide Rojas.
Horas después, y mientras su presencia en Santiago no pasaba desapercibida, el chef publicó dos stories en su Instagram en los que reconocía el «trabajo bien hecho» del restaurante, alabando la frescura del marisco («some of the freshest seafood in Spain is in Santiago… well done Abastos 2.0») y la impresión que le dejaron las volandeiras de lugar («the most amazing scallops»). «Es un orgullo y un halago que alguien que tienes como referente hable así de nuestra cocina, que diga que nuestras volandeiras son asombrosas», desliza siempre en plural Rojas. «Yo no había enterado de las publicaciones. No había dado tiempo, pero mis compañeros me advirtieron», añade.
El sábado por la noche Gordon Ramsay hizo parada en A Maceta, otros de los locales de mayor renombre en Santiago. «Fue un cliente más; no se hizo notar y, al acabar, quiso felicitarnos y darnos la mano uno por uno», coincide Jorge Gago, el jefe de cocina. «Parecía que él estaba agradecido a nosotros, cuando realmente lo estamos nosotros», añade, explicando cómo quisieron hacerle un repaso por su carta actual, unas propuestas que el chef también quiso alabar en sus redes con un «beautiful food» (comida bonita) sobre un snack de tartar de salmón y un «stunning meal» (impresionante comida) sobre un pani puri —un snack, de aperitivo— de sardina. «Como rota tanto nuestro menú, si llega a venir hace un mes, le ofreceríamos otros platos», sostiene Gago.
«Da gusto ver su cercanía, su carácter bromista, también con la gente, que le solicita fotos. Para nosotros fue un lujo que viniera», concluye el chef.