La Casa Galega da Cultura acoge la colección de arte que donó a la ciudad de Vigo en 1997 Francisco Fernández del Riego, intelectual galleguista al que la Academia dedicará el Día das Letras del 2023
21 dic 2022 . Actualizado a las 00:59 h.Durante años, la Casa Galega da Cultura de Vigo fue conocida en los círculos literarios y galleguistas como la Casa de Don Paco. Allí ejercía su apostolado a favor de Galicia Francisco Fernández del Riego, el puente de unión entre la generación galleguista de los años treinta de la pasada centuria y quienes recogieron el relevo a partir de los años cincuenta, en plena «longa noite de pedra».
El 12 de diciembre de 1997, aquella Casa da Cultura Galega se hizo un poco más Casa de Don Paco. El entonces presidente de la Real Academia Galega inauguraba en aquel edificio la muestra pública de su colección de arte. A lo largo de los años, y fruto de sus amplias amistades, Fernández del Riego fue reuniendo una interesante colección de arte que quiso compartir con sus convecinos. Para ello, realizó una donación al Concello de Vigo.
Aquella colección representaba una completa visión panorámica de una época especialmente difícil para las corrientes artísticas y culturales, y mucho más si tenían algún tipo de connotaciones galleguistas. Estaba compuesta por pinturas, esculturas, fotografías y objetos personales diversos de Fernández del Riego valorados en aquel momento en unos 50 millones de pesetas (en torno a 300.000 euros).
Pero junto con aquellos cuadros y otras expresiones artísticas, Don Paco también donó libros, cartas y otros documentos de gran valor cultural. Fueron más de veinte mil títulos, a los que se añadía la correspondencia personal que el intelectual mantuvo a lo largo de décadas con las más destacadas figuras del galleguismo y la intelectualidad de su momento. Manuscritos, primeras ediciones de libros y una enorme cantidad de documentos de toda naturaleza, constituían una aportación de primera mano y, por lo tanto, valiosísima para el estudio de una época que fue muy importante en la historia de Galicia.
Numerosos artistas
Los trabajos de instalación del museo y de clasificación de todo el material comenzaron a mediados del mes de mayo de 1997, con un presupuesto aproximado de ocho millones de pesetas (40.000 euros), y en diciembre de aquel año ya estaban las instalaciones preparadas para recibir las obras de Ovidio Murguía, Manuel Torres, Maside, Castelao, Seoane, Virxilio Blanco, Laxeiro, Colmeiro, Díaz Pardo, Prego, Mario Granell, Pesqueira, Mercedes Ruibal, Din Matamoro, Sevillano y Briones, entre otros artistas representados, así como algunas reproducciones de dibujos en carteles, entre ellos, alguno de Picasso fechado en el año 1951.
Aquel 12 de diciembre de 1997, el alcalde de Vigo, Manuel Pérez, afirmaba que la ciudad tenía una deuda de gratitud con Francisco Fernández del Riego, y destacaba la faceta personal, de trabajo por el galleguismo y de «transmisor de inquedanzas» del donante. Lo calificó de bueno, vital, y con gran señorío moral, «algo que hoy escasea», dijo el regidor olívico.
Junto a Del Riego estuvieron en aquel acto su mujer, Evelina Hervella, la alcaldesa y concejales de Lourenzá, la villa natal del escritor, y muchos amigos, entre otros, Isaac Díaz Pardo, Alfonso Zulueta de Haz, Xosé Luis Méndez Ferrín, Xesús Alonso Montero, Víctor Moro, Blanca Penzol, Isla Couto y Victoria Carballo Calero.
Se da la circunstancia de que hoy en día la pinacoteca municipal de Vigo, abierta en la calle de Abeleira Menéndez, también lleva el nombre de Francisco Fernández del Riego, al que la Real Academia Galega dedicará el Día das Letras del próximo año 2023.
Antes de ser la Casa Galega da Cultura, el edificio fue casa consistorial. Construido a mediados del siglo XIX y allí se mantuvo hasta mediados de la década de los años setenta del siglo pasado, momento en el que entró en funcionamiento el actual Concello situado en la Praza do Rei.
El edificio, con fachadas a las plazas de la Princesa y la Constitución, se convirtió durante la década de los ochenta en la Casa da Cultura, especialmente, dedicado a acoger exposiciones ya que todavía no había llegado a manos municipales la Casa das Artes. En 1985, la Fundación Penzol solicitaba con éxito la colaboración del Concello de Vigo para albergar en ese edificio su amplia biblioteca y archivo. Diez años más tarde, y tras una rehabilitación importante, el antiguo consistorio se convertiría en la Casa Galega da Cultura, y en ella ya se integraba definitivamente la Fundación Penzol, que hasta entonces estaba en un local perteneciente a la caja de ahorros.
Con ese traslado, el lugar se convirtió en el centro de trabajo de Francisco Fernández del Riego, nacido en 1913 en la localidad lucense de Vilanova de Lourenzá. Dice Ramón Nicolás, crítico y estudioso de la literatura, que Don Paco era un «obreiro do galeguismo». Y es una definición que se adecúa a su trabajo, casi siempre en la sombra, pero vital para el mantenimiento del sistema literario gallego en condiciones sumamente adversas. Don Paco estudió Derecho, pero su vocación era cultural. Llegó a Vigo después de estar en la guerra en el bando franquista, lo que no impidió que, a su regreso, tuviese que abandonar Santiago ante la amenaza de los falangistas. Se asentó en Vigo en 1939, y ya no abandonaría esta ciudad hasta su muerte en el 2010, cuando tenía 97 años.