En este pueblo de Ourense de veinte vecinos brilla la estrella fugaz más grande de Galicia

En Belcrime, una pequeña aldea de Vilamarín, viven poco más de veinte vecinos pero son suficientes para llevar a cabo iniciativas con las que hacerse notar. Uno de los más apasionados por su pueblo es Roberto Gómez. Este soldador, divertido y entusiasta, se ha propuesto situar Belcrime en el mapa y hacerlo a lo grande. En octubre consiguió que dos de las mejores orquestas del panorama actual, París de Noia y Olympus, tocaran en su aldea. Las actuaciones reunieron a más de 4.000 personas en esta pequeña localidad. Ahora, llegada la Navidad, a Rober, como le conocen todos, la cabeza no le para. «No 2020 comezamos co trineo do Nadal. Somos cinco amigos disfrazamos de elfos e de Papá Noel que o que queremos é achegar as tradicións e a ilusión aos máis pequenos das aldeas máis afastadas. O municipio contrátanos e imos recorrendo cada núcleo, levando música e caramelos e recollendo as cartas dos rapaces», explica. Esta actividad continúa pero ahora en su tierra, en Belcrime, ha querido ir un paso más allá.

«Estou cansado de ter que ir a Ourense ou a Vigo para desfrutar dos adornos, das luces e do Nadal. Nos pobos pequenos, se queremos, tamén podemos facer unha decoración xenial», afirma. Lo que ha hecho es construir la estrella fugaz más grande de Galicia y, cree, de España. «Ata agora a maior estaba en Xixón pero penso que a superamos. A nosa ten case trinta metros de largo», cuenta. La ha hecho él mismo, que se dedica a la carpintería metálica, y ha tardado una semana en construirla. La base está cubierta por luces led y por adornos que han ido donando los vecinos de Belcrime y de otros puntos de Vilamarín. «É unha estrela colaborativa e solidaria, coa que pretendemos que veña xente visitarnos pero tamén doar xoguetes e roupa que logo entregaremos ao Concello para que todos os nenos teñan regalos estas festas», admite Rober. Está en el campo de la fiesta y se ilumina a diario, desde las 18.30 horas.

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