Deja la farmacia para apostar por la ganadería y el turismo en Triacastela: «Non valoramos o que temos»
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Teresa López abrió este año una casa rural en su aldea natal para disfrutar de la zona más allá del Camino de Santiago
28 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.San Salvador de Toldaos es una pequeña aldea de Triacastela que este año abrió el primer negocio de su historia. Es posible gracias a un cambio de mentalidad que valora y promueve la naturaleza del interior de Galicia. «O mellor que temos é a autenticidade, territorios con pouca man do home», defiende Teresa López. Esta lucense es quien predica la idea y por eso abrió este año Os Prados da Albela, una casa rural para familias.
La vida actual de Teresa López dista mucho de su dedicación profesional. La lucense es farmacéutica y, como comercial, viajaba por toda Europa para vender los productos del sector. «Deixei todo iso atrás». Cuando regresó hace años a su Triacastela natal decidió introducirse en la ganadería, concretamente de las vacas limusinas, de las que tiene sobre una decena actualmente.
Para complementar y diversificar esta actividad económica, en la pandemia, empezó a darle vueltas a una posible salida para la casa de unos familiares que había comprado en su misma aldea. Fue ahí cuando decidió rehabilitarla para convertirla en casa rural. «Cando estiven por Europa, fixeime que alí a xente valora moitísimo poder irse as fins de semana ao campo ou cos seus animais», recuerda. A la lucense le pareció que en Galicia también deberíamos valorar esta «privilexiada posibilidade».
Por eso solicitó una ayuda del Grupo de Desenvolvemento Rural para reconvertir la casa en un lugar de desconexión para parejas o familias que quieran estar rodeados de verde o bien conocer algunos de los puntos del interior de la provincia. «Sei que é un momento complicado para abrir un negocio, por eso foi esencial os ánimos que me deron os albaneis e tamén a arquitecta, Lucía Fernández», agradece. Tras más de un año de obras, este 2022 Teresa estrenó Os Prados da Albela y asegura que está contenta con el interés generado: «A xente quere tranquilidade pero á vez dá vida ao pobo».
Alojamiento completo
La pensión de la lucense consta con dos habitaciones dobles con un baño individual. Pero el alquiler incluye todo el alojamiento, con cocina, salón y una amplia finca a la que da paso el porche. Las vistas son a las montañas de Triacastela. Aunque la vivienda cuenta con todas las comodidades más actuales, Teresa quiso conservar la estructura de piedra y madera que recuerda a una casa tradicional del interior lucense.
Teresa López, que también vive en la misma aldea, no solo ofrece un techo en el que dormir sino que le explica a los huéspedes las posibilidades que tienen en la zona. En su propia página web, para cada estación del año destaca algunas actividades u ofrece gastronomía y cultura local.
Turismo más allá del Camino
En este tiempo, solo fueron un par de peregrinos los que durmieron en Os Prados da Albela, en un concellos que mayoritariamente se nutre del Camino. Primero porque tienen que desplazarse cuatro kilómetros y segundo, porque la casa de Teresa está pensada para los que quieren y pueden introducirse en la cultura local. «O meu obxectivo é revalorizar aldeas como esta de Triacastela, onde se poden facer paseos privilexiados, estar lonxe do asfalto e os ruídos ou descubrir a gastronomía que se conserva desde hai séculos...», explica.
Por la autenticidad y el valor que tienen los lugares como San Salvador de Toldaos, «pode volver a fixarse poboación». Actualmente hay nueve casas y solo dos familias viviendo permanentemente. Una de ellas es Teresa con su hija: «A educación rural é outro dos noso privilexios». Desde Toldaos, también se puede conocer O Courel, Os Ancares o mismo Lugo. «Lugares onde a man do home non estropeou a súa esencia».