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El «notable ataque» de microorganismos y la erosión amenazan el futuro de la ermita de A Lanzada

Marcos Gago Otero
Marcos Gago SANXENXO / LA VOZ

VEN A GALICIA

Cultura licita la rehabilitación de las paredes exteriores del emblemático templo sanxenxino

30 dic 2022 . Actualizado a las 12:04 h.

La ermita de A Lanzada, en la parroquia sanxenxina de Noalla, será objeto de una intensa limpieza y restauración de sus paredes exteriores para evitar su deterioro en el futuro. Este templo, uno de los más icónicos y reconocidos por los gallegos y los turistas que se acercan a las Rías Baixas, precisa de una intervención de urgencia, que asumirá la Consellería de Cultura y cuyos pliegos de condiciones y proyecto se publicó esta semana en la web oficial de contratación de la Xunta. El presupuesto para la actuación roza los 120.000 euros y tendrá un plazo de ejecución de cinco meses. 

En la memoria de la licitación, la Administración autonómica resalta que «o inmoble atópase nun grave de estado de conservación». Aunque la estructura del edificio no amenaza riesgo de desplome, sin embargo, «presenta patoloxías que se deben subsanar con urxencia» porque «poñen en perigo a súa futura conservación». Concretamente, Cultura concluye que se observa «un notable ataque biolóxico en forma de especies colonizadoras, presentando un ataque xeralizado de microorganismos en toda a extensión da superficie do material lítico, que pon en detrimento a futura conservación do conxunto». Es decir que la piedra de las fachadas está dañada por la presencia de líquenes y otros microorganismos que las están dañando y que, aunque el peligro no es inmediato, su consecuencia puede ser grave si no se ataja a tiempo. 

Además, al encontrarse la capilla al aire libre, totalmente exenta de ningún edificio al lado o que la ampare de los efectos del viento y de la proximidad del mar, se recalca que la ermita se halla expuesta a «condicións climatolóxicas fortemente extremas e adversas, e á erosión que provocan». Un efecto inmediato es que «practicamente toda a totalidade dos elementos pétreos teñen un contido en sales elevado, o que está afectar a súa conservación». Por último, se han detectado filtraciones de agua desde el tejado por problemas en la estabilidad de las cruces de la cubierta, que tendrán que ser enderezadas para evitar su desplome y poner fin a la entrada de agua.

La cruz de la fachada principal está torcida
La cruz de la fachada principal está torcida M.G.

Los trabajos necesarios para salvar la capilla de A Lanzada incluye la eliminación de plantas que crezcan en el tejado, así como la limpieza y consolidación de todas las piezas de piedra de las fachadas con un tratamiento adecuado. Además de la supresión de esos microorganismos dañinos, también se deberá actuar en la desalación de las piedras y reforzar el entorno de las cruces de la cubierta, poniendo, una de ellas, la que se asienta sobre la fachada principal, derecha, ya que en la actualidad está torcida. En el pliego de condiciones se prevé un estudio de la acción del viento sobre el templo, que permita perfilar con claridad sus efectos sobre la erosión de la piedra de las fachada y servir como guía de futuras actuaciones de restauración si fuesen necesarias.

Los canecillos bajo los aleros tuvieron en otro tiempo formas figurativas y geométricas
Los canecillos bajo los aleros tuvieron en otro tiempo formas figurativas y geométricas M.G.

La ermita de A Lanzada data de los siglos XII y XIII, con construcciones posteriores. De la época románica original solo se conserva el ábside, es decir la parte del templo que reviste el altar. Esta capilla es una de las más famosas de Galicia al encontrarse en un lugar lleno de leyendas y tradiciones antiquísimas como el baño de las nueve olas para las mujeres estériles en la playa cercana. En su larga trayectoria histórica, la ermita ha sido modificada y, precisamente por esta razón, se acometerá también un estudio histórico arqueológico con sondeos manuales de una superficie mínima de doce metros cuadrados en el perímetro de la ermita. Esto permitirá saber si quedan restos soterrados de elementos arquitectónicos hoy desaparecidos. El proyecto encargado por Cultura incluye, además, la ejecución de una simulación en tres dimensiones de la capilla mediante fotogrametría, escalado y georeferenciado exterior. De esta forma se podrá conocer cómo fue y cómo es la historia de la ermita de A Lanzada.