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El rapero de moda Fernando Costa elige el barrio de Deán para uno de sus vídeos

María Xosé Blanco Giráldez
m. x. blanco RIBEIRA / LA VOZ

VEN A GALICIA

De la mano del director Juan Barbazán, grabó en Ribeira las imágenes de «Oye»

30 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Oye, ¿qué te ha pasao? Que me han contao que vas de capo y que te han robao. Así comienza uno de los últimos temas de Fernando Costa, un rapero que es todo un referente en la escena nacional y que incluso llena conciertos al otro lado del charco. Un grupo de vecinos de Ribeira tuvieron ocasión de escucharlo en directo, pues el artista ibicenco eligió el barrio de Deán para la grabación del videoclip de Oye. Y no acudió a la ciudad solo, sino que lo hizo junto a Dollar Selmouni, que lo acompaña en ese tema.

La canción, caracterizada por su tono alegre, está dedicada a la gente del barrio, por eso en el vídeo, los protagonistas son los residentes en Deán, desde niños hasta ancianos, que cantan, bailan y dan palmas al son del pegadizo ritmo. El vídeo, al que las calles e incluso el interior de alguna de las viviendas del barrio ribeirense sirven de escenario, acumula casi tres millones de visualizaciones en YouTube.

¿Como acabó el rapero de Ibiza, conocido artísticamente como Fernandocosta, en Deán? La clave está en Juan Barbazán, un compostelano que bate récords dirigiendo videoclips de música urbana. Con sus trabajos busca dar visibilidad a los pueblos y entre los más sonados está el que rodó con Don Patricio en Santa Comba.

Fue Barbazán el que buscó una localización que encajara a la perfección con la letra y el ritmo de Oye, una misión que no estuvo exenta de complicaciones: «Desde el principio tuvimos claro que había que rodar en un barrio gitano, pero era la época de la pandemia y no fue fácil encontrar uno, puesto que casi todos estaban de luto». Con la mediación de la Concellería de Cultura de Ribeira, el equipo del director compostelano logró contactar con la matriarca del poblado y ella accedió.

Tras superar ese primer escollo, afloraron otros obstáculos: «Nuestro primer objetivo era A Conlleira, pero allí fue imposible porque los residentes se opusieron. En Deán, dos personas de producción se pasaron un día hablando con los vecinos, explicándoles lo que queríamos hacer, para que se animaran a aparecer en el vídeo», recuerda Juan Barbazán.

Objetivo cumplido

Finalmente llegó el día y un equipo integrado por quince personas desembarcó en el barrio ribeirense. Fernandocosta y Dollar Selmouni no tuvieron problemas para transmitir su animado ritmo a los residentes. «Aunque al principio hubo quien se mostró reticente, al final conseguimos plasmar en el vídeo el ambiente de barrio que buscábamos, con niños jugando y alegría en las calles», destaca el director compostelano.

Barbazán no duda al asegurar que, pese a los escollos iniciales, todos los miembros del equipo que se desplazaron a Deán fueron tratados «como reyes», sobre todo los artistas protagonistas. Explica que el vídeo vio la luz casi un año después del rodaje: «Había mucha expectación por el resultado final, pero al final todos quedaron contentos».

En esta ocasión, el director compostelano grabó en territorio ribeirense la totalidad del videoclip de Oye, pero no era la primera vez que se desplazaba con su equipo a Barbanza. De hecho, localizaciones de Ribeira y Muros aparecen ya en un trabajo anterior de Fernandocosta: Lento, lanzado en marzo del año pasado.

A Juan Barbazán le gusta apostar por los parajes de su entorno a la hora de realizar sus trabajos: «Recorro toda Galicia y voy juntando escenas rodadas en un lugar y en otro. Eso también me sirve para ir guardando en mi cabeza localizaciones, a las que recurro cuando llega la ocasión». En este sentido, señala que ya una vez anterior había estado en el barrio ribeirense de Deán con otro cantante, Aissa, con el que rodó alguna secuencia del videoclip del tema Sangre de esclavo.

La visita de Fernandocosta ha quedado seguro grabada a fuego en la retina de muchos de los vecinos que aparecen en el vídeo de Oye, sobre todo entre los más jóvenes, que constituyen el sector mayoritario del público de un rapero que con solo 24 años ha conseguido hacerse un hueco en el panorama musical.