A pesar de que Galicia es conocida por sus conservas de pescados y mariscos, la primera compañía que se estableció en nuestra tierra era de perdices y pichones
26 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Por todos es conocida la tradición conservera de Galicia, que inició su andadura con el enlatado en el año 1850 en la localidad de Noia. Curiosamente, la empresa Caamaño fue la primera que comenzó con este innovador método de preservar alimentos con las perdices y pichones como materias primas. Pocos años después, empresas francesas desembarcaron en las rías gallegas y se asociaron con los artesanos del salazón para montar fábricas de pescados en lata. Estos eran casi todas familias catalanas que se habían venido a Galicia buscando hacer negocio, dada la escasez de sardinas que había en el Mediterráneo. Pero lo que fue un medio de investigación para que el Ejército de Napoleón tuviera a su disposición alimentos, de manera fácil para aguantar las largas campañas de asedio, con la invención de las latas la vida de las trincheras cambió en la Primera Guerra Mundial. Hoy en día, se han convertido casi en un producto gourmet. Si no, que le pregunten al futbolista mundialmente conocido David Beckham cómo ha llegado a incorporar las conservas gallegas en la primera división de los exquisitos enlatados sobre el resto de todos los países. Son numerosas las fábricas dedicadas al pescado, pero la fama de las conservas gallegas, va más allá de los productos del mar. Productos de la huerta, aves, elaborados cárnicos, platos preparados o setas, forman parte asimismo del conglomerado conservero gallego. Afortunadamente, existen una serie de empresas que también se dedican a meter en una lata lo mejor de la Galicia interior.
LA DESPENSA D'LUJO
Guisos de legumbres
Con más de 100 años de tradición agrícola familiar, desde Coristanco, la pareja formada por Lucía y José han hecho de la investigación y desarrollo el mejor arma para crear un desarrollo sostenible y una economía circular. Sus legumbres, presentes en las cocinas de los grandes chefs, ahora las podemos encontrar en conservas caseras como la de judión con nécora, alubia verdina con langostino y almeja o fabada celta.
GALO CELTA
Caldo de gallina
Cuando comenzó su andadura en Vila de Cruces, el avicultor David Sueiro no tardó mucho tiempo en que sus aves y sus huevos alcanzaran un lugar destacado en cocinas como la de Martín Berasategui. A su vez, está integrado en proyectos innovadores como el comedor de Inditex, o las conservas como el caldo de gallina ecológica, elaborado a fuego lento con una receta tradicional gallega.
ÁNADES GALICIA
Confit de pato
Las visitas veraniegas de Silverio Tallón para perfeccionar su francés hicieron que, para su sustento como estudiante, trabajara en un restaurante de la Costa Azul, en el que destacaba un plato de fuagrás. Desde entonces, el joven Silverio quiso ser avicultor y en 1999 consiguió materializar su sueño con Quinta da Curriza en Vilardevós (Ourense) donde cría patos y elabora foie y confit.
CASA DA AVOA
Choriciños
Las ocurrencias de los dos amigos propietarios de Casa da Avoa, Víctor y Abel, no tienen límites. Desde uno de los lugares más bellos de la costa atlántica, la comarca del Barbanza (A Coruña), con estas conservas de elaborados cárnicos como la orejas, el pastrami o los choricitos experimentan recetas innovadoras con unos resultados sorprendentes. Estos últimos los podemos encontrar con grelos, con queso o incluso al vino albariño.
ESENCIA ATLÁNTICA
Zaragallada
Desde el corazón de la Costa da Morte, en Muxía, esta empresa con su línea de salsas hace que el comer pescados y mariscos sea más rápido y sencillo. Su zaragallada, el relleno para la empanada gallega, se elabora artesanalmente en cocina de hierro, con una selección de materias primas de productores de la zona y a las que la cocinera, Mari Luz, se encarga todos los días de darle el toque tradicional.
CASTELO
«Boletus edulis»
Los campos que rodean la población de Vilalba, en Lugo, son ricos en hongos y vegetales y, en 1982, Andrés Castelo amplió su empresa de distribución de hongos y grelos, montando una línea de envasado de productos de la zona. Hoy en día, además de grelos y berzas, podemos encontrar un amplio catálogo de conservas de productos silvestres, ocupando las setas y especialmente el «boletus edulis» un lugar destacado.
COREN
Albóndigas de cerdo de castaña
Para las Cooperativas Orensanas las conservas cárnicas no son nada nuevo pues llevan años fabricándolas en su planta de O Porriño (Pontevedra) y comercializando todo tipo de referencias en decenas de países. Lo que sí es una novedad son las albóndigas de la gama Selecta. Bajo la denominación de cocina gourmet, son 100% naturales y elaboradas con carne de cerdo alimentado con castañas.
LA LALINENSE
Lacón con grelos
Desde la capital del cocido, Lalín, esta industria cárnica se dedica a envasar una de las recetas más tradicionales de Galicia. El cocido gallego cuenta con lacón, oreja, panceta, chorizo, patatas, grelos, garbanzos y caldo. Ya puedes disfrutar de la fiesta del cocido en todo momento y en cualquier parte. Para los que no se atrevan con tanto, también envasan un estupendo lacón con grelos.