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El Camino registró ya el paso de más de 2.300 peregrinos en la zona del Deza y Tabeirós

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN, A ESTRADA / LA VOZ

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De las tres vías que cruzan las comarcas, la Vía da Plata superó ya los 1.842 caminantes, el de Inverno los 334 y los 134 el de A Geira

14 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Las estadísticas recogidas por la Oficina del Peregrino de Santiago de Compostela reflejan que ya son 2.310 los peregrinos que, hasta el pasado día 12, ya hicieron el Camino por una de las tres rutas que pasan por las comarcas de Deza y Tabeirós y que llegaron a Compostela. La Vía da Prata continúa siendo la que más tránsito genera con 1.842 caminantes. Le sigue de lejos el Camiño de Inverno con 334 y el de A Geira y Os Arrieiros que pasa por el municipio de A Estrada con 134.

Este año, después del fin de los dos años xacobeos, el número de peregrinos se mantiene y la llegada de los meses de buen tiempo está disparando el número de viajeros. De hecho, año tras año, apuntan en los albergues, los meses de mayor afluencia suelen ser mayo y septiembre. Y el tirón se va ya notando. En lo que va de año a Santiago llegaron ya 80.212 peregrinos, de los cuales solo 23.065 fueron españoles.

Un poco menos de la mitad, 40.000 lo hicieron por el Camino Francés. El segundo puesto en afluencia le corresponde al Portugués con 20.091, seguido del Portugués por la costa con 7.763, el Inglés con 4.039 , el Primitivo con 3.040. El último de la lista es la Vía Céltica que solo registró un solitario caminante.

La estadística general arroja la llegada de 2.301 caminantes en enero, 2.880 en febrero, para crecer a los 11.507 en marzo y dispararse hasta los 25.384 en el mes de abril para sumar ya en los primeros doce días del mes de mayo 6.596.

En enero de este año de ese total soplo 34 realizaron la Vía da Prata, 30 siguieron el Camiño de Inverno y 3 el de la Geira, frente a los 1.020 que eligieron el Francés y los 522 que fueron por el Portugués. En febrero fueron 19 por el Camiño de Inverno y tan solo 5 por el de A Geira, mientras que la Vía da Prata contabilizó ya 114 peregrinos. Por el Francés, en cambio, fueron ese mes, 1.350 peregrinos y 779 por el portugués.

En marzo, la Vía da Prata sumó ya 323 caminantes, 37 el de Inverno y 19 el de la Geira. El Francés ya contó con 2.495 ese mes y el Portugués con 2.495.

El año pasado, el segundo Xacobeo y ya diluyéndose la pandemia, las cifras del año fueron otras, aunque en los primeros meses del año aún no se notaba. En enero del año pasado se contabilizaron 1.621 peregrinos, menos que los de este año. 57 fueron por la Vía da Prata, 47 por el de Inverno y 2 por el Camiño da Geira. Por el francés fueron ese mes 859 y 311 por el Portugués. En febrero del 2022 por la Vía da Prata pasaron tan solo 78, 42 por el de Inverno y 2 por el Camiño da Geira e dos Arrieiros. Ese mes el Francés registraba 890 caminantes y el Portugués 571.

En marzo del pasado año. Las cifras ya se habían incrementado con 161 por la Vía da Prata, 57 por el de Inverno y solo 1 por la Geira. De los 7.389 que llegaron a Santiago ese mes, 3.921 eligieron el Francés y 1.890 el Portugués.

Desde Australia a Francia, Italia o Alemania

Si de peregrinos extranjeros se trata las nacionalidades que más se repiten entre los que pasan por las comarcas se encuentran la francesa, la italiana y la alemana. A estos se suman los ingleses, pero también los estadounidenses, junto con algunos asiáticos, especialmente coreanos, pero son los menos. En estos primeros meses del año la mayoría de los grupos aún son pequeños, a los que se suman los que viajan solos o en pareja. Hay quien hizo el camino hace tres o cuatro años y regresó de nuevo este año.

« O ano ía moi lento pero desde a segunda quincena de abril animouse moito a afluencia»

Pese a haber dejado atrás el Año Xacobeo, que por primera vez en la historia y a causa de la pandemia se prolongó durante dos años consecutivos, el Camino continúa siendo un motor económico y turístico. El año empieza bien y registra ya cifras que, en algunos casos, superan las estadísticas de los primeros meses del año anterior. Luis Otero del albergue de As Carpinteiras, en Rodeiro, explica que «o ano ía moi lento pero desde a segunda quincena de abril animouse moito a afluencia». Una opinión con la que también coincide José Maril, del albergue de Silleda.

Otero señala que «foi un salto grandísimo». La llegada del buen tiempo está empezando a disparar las pernoctaciones y entre los caminantes, apuntan ambos, abundan los mayores de 50 años, entre ellos muchos extranjeros jubilados que suelen elegir para hacer la ruta estos meses con una meteorología normalmente más benigna. Entre los españoles, asegura Otero, «este ano hai moita xente de Castellón e de Valencia, xunto con andaluces que hai moitos sempre». La mayoría llega a Rodeiro desde Ponferrada donde toman el desvío del Camiño de Inverno huyendo de la saturación del Francés y que «parece o metro de Madrid». Gallegos, asegura, «hai moi poucos, en casa do ferreiro, coitelo de pau».

Maril indica que los extranjeros que llegan a Silleda por la Vía da Prata, la mayoría partió de Sevilla, mientras que entre los españoles hay muchos que salieron de Ourense para hacer los 100 kilómetros que marcan el mínimo para la compostelana o de otros lugares como Salamanca o Zamora. La mayoría de españoles son catalanes, andaluces y madrileños.