Docenas de esculturas inspiradas en la obra de Picasso salpican la arena de A Lanzada
VEN A GALICIA
El Monte da Vila reunió a 700 escolares que demostraron sus dotes artísticas
23 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La playa de A Lanzada se convirtió ayer en un pequeño museo al aire libre de esculturas inspiradas en la obra de Picasso, que se desvaneció con la subida de la marea. Es lo que tiene modelar en arena, que la naturaleza sigue su curso y se las lleva. Los autores de estas recreaciones de arte efímero fueron alrededor de setecientos escolares de Enseñanza Secundaria llegados de toda Galicia, que acudían, como cada año, a la convocatoria realizada por el instituto Monte da Vila.
La actividad Esculturas na area programada por el departamento de Dibujo del centro, cumple ya diecisiete años y sigue cosechando éxitos. Al final, de lo que se trata es de que el alumnado disfrute la experiencia, deje volar su imaginación y trabaje obras con volumen. «Y qué mejor que la arena para hacerlo», confiesa Josebe Arrillaga, coordinadora de la cita. Los estudiantes, por grupos de cinco o seis, desembarcaron en el arenal bien temprano para aprovechar la mañana. Algunos de ellos, con su pieza en miniatura realizada en plastilina y la intención de extrapolarla a su parcela en la playa, tal y como es recomendable, aunque no todos lo hicieron. Siempre hay participantes que optan por esculpir de forma libre. Eso sí, con el Picasso impreso en papel y bien a la vista. Ayer, el viento no ayudó en la tarea, ya la arena lucía más seca que en otras ocasiones, y eso dificultaba el trabajo, pero aun así podían verse sobre la orilla representaciones de muchos cuadros famosos del pintor malagueño, y abundaban elementos del Guernica, ya que recrear la obra entera llevaría horas.
Pero hubo también esculturas más pensadas: «Esta es una mujer sentada en una silla», comentaba una alumna mientras le daba forma a un óvalo de arena, señalando que la figura pertenecía a otra obra famosa, El sueño. Los más valientes se atrevieron incluso a unir dos cuadros del pintor, porque la imaginación no tiene límites, y el sol permitía trabajar cómodamente.
La actividad, en definitiva, está destinada a crecer, y desde el IES Monte da Vila no descartan traer a algún profesor o a estudiantes de volumen de escuelas de arte que den una pequeña clase magistral. «De hecho los invitamos, pero no han podido venir», comenta Josebe, que ya ha pensado la temática para el año que viene: «Seguramente la inspiración serán las gárgolas», dice. Las esculturas, que fueron registradas por los profesores para tener documento gráfico de lo sucedido, desaparecieron sobre las cinco de la tarde, con la inevitable subida de la marea.