Primero fueron los bancos y ahora son los columpios. Algunos de los más hermosos rincones de nuestra geografía acogen estos espectaculares balancines tan propicios para el disfrute del paisaje como para exhibirlos en TikTok e Instagram
19 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.
LAGO DAS PONTES (As Pontes)
El proyecto de recuperación de la antigua mina de Endesa, reconvertida ahora en el mayor lago artificial de Europa, cuenta desde hace unos meses con un nuevo elemento de atracción: un columpio para dos personas instalado sobre la playa con una impresionante panorámica sobre el lago, la ruta que lo bordea y las montañas de la comarca, y desde el que, en días despejados, se divisan soberbias puestas de sol.
EL COLUMPIO DEL AMOR (Tui)
No todos los columpios tienen por qué estar ubicados en vertiginosos miradores. El de Tui se ubica en un rincón de lo más romántico, que es todo sosiego. Con un paisaje enfrente, eso sí, que es pura delicia, dominado por el imponente Miño sobre el que se yerguen las sierras portuguesas al otro lado de la raya. El columpio, ubicado en el parque de O Penedo, junto al paseo fluvial, está protegido por una vistosa pérgola de metal, que en su día fue una antigua jaula, y que lo hace aún más llamativo.
PUNTA ESPIÑEIRO (Cambados)
Además de albariño, Cambados presume de los mejores atardeceres de las Rías Baixas. Uno de los mejores lugares para disfrutarlos es punta Espiñeiro, justo en el lugar en el que el río Umia se entrega, dócil, al Atlántico. Al balanceo propio del columpio se une el vaivén perenne de las mareas, que provoca allí indescriptibles juegos de luces y de sombras, entre islotes, arenales y cañaverales que juegan al escondite, siempre bajo la solemne mirada de la sierra de Barbanza, dominando el paisaje desde la otra orilla de la ría de Arousa.
O BAMBÁN DO SOLPOR (Nogueira de Ramuín)
Su nombre ya es lo suficientemente elocuente. Pero no hay por qué esperar a la puesta de sol para disfrutar de la belleza de este rincón de la Ribeira Sacra ourensana. Instalado sobre una poderosa roca de granito que corona un cerro, el columpio se mece sobre un paisaje genuinamente gallego, salpicado de colinas y valles, tras los que se adivina el río y los cañones por los que discurre. El columpio fue objeto de un acto vandálico hace unas semanas, pero sus promotores, la siempre inquieta y proactiva asociación Móvete por Nogueira ya trabaja en su reposición.
TERRA BRAVA (Doade)
El vértigo se apodera de las infinitas fotos que se realizan en este hermosísimo rincón de la Ribeira Sacra. La iniciativa partió del propietario de la bodega Terra Brava y no ha podido resultar más exitosa. Un permanente hype en las redes. La imponente estampa del cañón del Sil, cuyas laderas remontan los viñedos de la bodega, amplifica aún más su espectacularidad cuando en escena aparece el balancín, con su pasajero «sobrevolando» el paisaje. La llegada al columpio forma parte de una ruta divulgativa que incluye un paseo por el viñedo y una visita guiada a la bodega.
A LAXE (Vigo)
Con cuatro metros de altura y situado en la azotea del centro comercial A Laxe, ubicado en el muelle de la Estación Marítima de Vigo, este columpio permite durante las horas diurnas hacerse una idea de la grandiosidad de la ría viguesa, con las Cíes siempre como vigías. Pero es a la hora del atardecer cuando el paisaje alcanza su máximo esplendor desde esta privilegiada atalaya, sin ningún elemento que interrumpa su majestuosidad. Acceder a él exige un tique de compra de cualquier importe en el centro comercial.