La comunidad está llena de fortificaciones medievales que, mejor o peor conservadas, sirven para entrar en contacto con tiempos muy, muy lejanos
31 oct 2023 . Actualizado a las 17:09 h.España es país de castillos. No hay provincia que no tenga, al menos, un puñado de estas estructuras imponentes y orgullosas que, muchas páginas de calendario atrás, fueran escenario de batallas, ceremonias, bodas y traiciones. Galicia no solo no es una excepción a esta regla, sino es que, probablemente, su confirmación más rotunda.
Diseminados por toda la región, aún se yerguen, marciales algunos, presumidos otros, decenas de estos templos caballerescos. A continuación, una breve relación de los que claman a gritos por una visita. Los imperdibles. Aunque, vaya por delante, quedan fuera muchos otros igualmente reseñables.
Santa Cruz de Oleiros (A Coruña)
No es el castillo más grande ni el más espectacular. Pero es especial por varias razones. La más llamativa, su ubicación. Se encuentra en mitad de un islote, conectado con el pueblo a través de una pasarela.
Castillo de Monterrei (Ourense)
Probablemente el más impresionante y el mejor conservado. Tiene incluso una pequeña ciudad medieval en su interior. Fue tomado por los franceses en una cruenta batalla de la Guerra de Independencia.
Castillo de la Palma, Mugardos (A Coruña)
Entre la montaña y el mar. Una fortificación reducida pero compacta que parece sacada de un cuento de piratas y casacas rojas.
Castillo de Maceda (Ourense)
En lo alto de una pequeña colina se eleva esta acogedora edificación. Aunque lo de «acogedora» es algo más bien reciente, pues hace ya unos cuantos años que fue reconvertido en un hotel.
Castillo de San Felipe, Ferrol (A Coruña)
Otro fortín bañado por las agua. En este caso, por las de la ría de Ferrol. Extraordinariamente conservado y, sin duda, uno de los puntos más bellos e interesantes de la zona.
Castillo de San Vicente, Monforte de Lemos (Lugo)
Erigido, ni más ni menos, que en pleno siglo XII. Más antiguo que España misma, podría decirse. Hoy es, además Parador Nacional. La joya de la corona del municipio.
Castillo de Soutomaior (Pontevedra)
Otro testigo de tiempos muy, muy pretéritos. Por si la belleza de la construcción no fuera suficiente, se encuentra además ubicado en un evocador paraje natural. Sus frondosos jardines, otra de las múltiples razones para hacer una visita.
Castillo de Vilasobroso, Mondariz (Pontevedra)
Al ver estos legendarios muros erguidos entre las copas de los árboles de un profundo valle, uno no puede evitar recordar esas historias de príncipes, princesas y dragones. Hoy hace las veces de museo comarcal
Castillo de San Antón (A Coruña)
Todo un clásico. Uno de los más famosos de Galicia, si no el que más. Probablemente ayuda que esté ubicado en pleno centro de A Coruña. Suele albergar toda clase de actividades culturales.
Castillo de Nogueirosa, Pontedeume (A Coruña)
Destaca por su larga torre, desde la que se puede observar y controlar todo el valle del Eume, Fragas incluidas. Así que, si es usted un turista, vaya por las vistas. Pero si es un señor feudal, tómelo por asalto, tiene gran valor estratégico.