Cabañas junto al mar, un nuevo refugio turístico en la naturaleza junto a las playas de Foz
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El negocio de María José García arranca con reservas de varios puntos de Galicia y de Asturias, «estamos muy contentos»
09 nov 2024 . Actualizado a las 22:18 h.Ha pasado más de un año desde que en estas páginas les avanzábamos el proyecto de un negocio con un concepto de turismo diferente, con la naturaleza como protagonista. Hoy les contamos que las cabañas turísticas Camiño do Mar ya han abierto sus puertas en un paraje único de Forxán, en Foz, rodeadas de prados y junto al mar y al paseo marítimo que une dos playas con bandera azul: Llas y Peizás. Entre los primeros clientes de estas casitas de madera hubo huéspedes de A Mariña, de Pontevedra, de Abadín ... y también reservas desde Oviedo.
María José García es la promotora de este establecimiento que contribuye a diversificar la oferta de alojamiento turístico en el municipio y que abrió el pasado 31. En una finca de unos 5.000 metros cuadrados se levantan seis cabañas de madera con muchas prestaciones. Una es de recepción y las otras cinco, con una superficie de 38 metros cuadrados cada una, están preparadas para alojar a cuatro personas.
A Lagoa, Ollo do Mar, Auga Doce, Pena do Escairo y A Tamaniña son bellos enclaves del litoral focense y también los nombres de cada una de las cinco cabañas. Dos de ellas tienen jacuzzi y desde una, A Tamaniña, se puede disfrutar de magníficos atardeceres. Las cabañas tienen dormitorio (una cama grande y un sofá-cama) con baño y sala de estar con kitchenette (fregadero, nevera, microondas, cafetera y menaje).
Al abrir todo el año cuentan con calefacción y wifi, así como con extras disponibles como el servicio de desayuno —donde priman los productos locales— y alojamiento para mascotas. «Estamos contentos tras las apertura. El primer fin de semana tuvimos ya tres cabañas ocupadas y tenemos alguna que otra reserva para el próximo», confiesa María José García, que cree que el no inaugurar el negocio en temporada alta le permitirá ir adaptándose e incluso haciendo algún que otro cambio tras escuchar a los huéspedes.
En cada refugio hay hojas en las que estos pueden plasmar sus sugerencias. ¿Qué es lo que más les ha gustado a los que se han alojado hasta el momento? «La gente destaca sobre todo la tranquilidad de la zona», asegura esta emprendedora que remarca que desde que se gestó el proyecto y en todas sus fases ha tenido un apoyo incondicional, el de su pareja, Daniel Río: «Sin él, nada sería posible».