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La Ribeira Sacra ourensana estrena museo de arte religioso en Castro Caldelas

María Cobas Vázquez
maría cobas OURENSE / LA VOZ

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Vista del interior del Museo de Arte Sacro de Castro Caldelas.
Vista del interior del Museo de Arte Sacro de Castro Caldelas. LOLITA VÁZQUEZ

El espacio recoge piezas de todas las parroquias de la localidad

06 dic 2024 . Actualizado a las 19:15 h.

La Ribeira Sacra ourensana ya tiene su museo religioso. Ya existía uno en el territorio, el de las Clarisas de Monforte, pero en la provincia de Lugo. El nuevo espacio expositivo está en Castro Caldelas, en la iglesia de Santa Isabel en Cimadavila, un templo ubicado a escasos metros del castillo medieval que llevaba años en desuso. «Culmínase un soño largamente desexado polos caldelaos», destacó el párroco, José Manuel Armesto, en la inauguración.

Tras un largo proceso para conseguir la cesión del inmueble por parte del obispado, el Concello sacó adelante un proyecto con la colaboración de la Xunta —que asumió el arreglo del tejado— y de la Diputación —que cedió las vitrinas—. Todavía no está rematado del todo. Queda trasladar algunas piezas y unos últimos retoques. Son apenas unos detalles, pero la alcaldesa, Sara Inés Vega, no puso fecha. En cuanto esté todo rematado el Museo de Arte Sacro podrá visitarse solicitándolo en el castillo.

«É un reflexo da riqueza sacra dun Concello que en cada un dos 95 núcleos conta cunha capela, unha igrexa, un mosteiro ou un santuario», destacó Vega, que puso en valor que desde todas ellas se hubiese aportado alguna pieza. En todo caso, quiso dejar claro que los vecinos siguen siendo los propietarios de todos los objetos y que podrán ir a buscarlos siempre que quieran «para sacalos en procesión ou para exhibilos na festa; as pezas non desaparecen». Puso en valor el trabajo realizado por el historiador Manuel Carrete, que se encargó de documentar las piezas y dar forma al espacio expositivo.

Entre los fondos del museo destacan el Foro do Bo Burgo, el primer documento escrito en gallego, que data del 1228; las tejas escritas del monasterio de San Xoán de Camba, del siglo XV; o reliquias traídas por Andrés de Prada, natural de O Barco de Valdeorras y que fue secretario del rey Felipe II. También hay varias esculturas obra de Gregorio Español, que es también el autor del altar manierista de la propia iglesia en la que se ubica el museo.

«A relación entre fe, culto e cultura está presente neste tempo que foi parroquial», destacó el obispo, Leonardo Lemos, que deseó a los presentes «que isto sexa para ben dun pobo que busca as súas raíces». El diputado provincial responsable del área de Cultura, César Fernández, destacó el «marco incomparable» del nuevo museo «nunha vila de gran tradición cultural». «Non é só recibir unha herdanza, senón un compromiso da comunidade veciñal de que todo o noso patrimonio cultural será transmitido ás xeracións que virán detrás de nós», destacó por su parte la directora xeral de Patrimonio, María del Carmen Martínez.

Olegario Sotelo Blanco a las puertas del antiguo centro comarcal, donde se supone que irá el Museo Antropolóxico.
Olegario Sotelo Blanco a las puertas del antiguo centro comarcal, donde se supone que irá el Museo Antropolóxico. Santi M. Amil

Lamento porque siga pendiente el museo de Olegario Sotelo Blanco

«Eu non sería eu se non fixera unha pequena reivindicación». Así empezaba la parte final del discurso de la alcaldesa de Castro Caldelas, Sara Inés Vega, en la inauguración del Museo de Arte Sacro. Se dirigía entonces al diputado provincial César Fernández. «Teño alí enfronte a Olegario. Antes deste museo tiña que estar funcionando o Museo Antropolóxico da Ribeira Sacra, o museo de Olegario Sotelo Blanco», remarcó. Y añadió: «Chegamos a acordo entre a consellería, nós e a Deputación e a verdade é que está sen funcionar. Eu pídoche por favor que o traslades e que deberían poñer a funcionar ese museo». Y, curándose en salud, animó al propio filántropo a seguir haciendo presión: «Se non funciona, terás que vir ao Concello e xa faremos como poidamos, pero ter ten que saír».

«Teño unha palleira en Quintela, se non...», respondió Sotelo Blanco sin ocultar su resignación al ver que sigue sin cumplirse un proyecto largamente anunciado. El convenio para que la fundación que lleva su nombre trasladase el Museo Antropolóxico que tenía en Compostela a Castro Caldelas se firmó en el 2017. Un año después se anunció que se ubicaría en el antiguo centro comarcal, ubicado enfrente del castillo. Pero de momento nada. El pasado mes de abril, Sotelo Blanco se reunía con el presidente de la Diputación, Luis Menor, y se anunciaba la apertura inminente del museo. Pero a día de hoy sigue sin fecha. Preguntado al respecto, César Fernández dijo desconocer en qué punto se encuentra el proyecto.