Las obras se ejecutan de forma paralela poniendo en valor el monumento
02 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.La Consellería de Cultura prevé que las obras de restauración y mejora del monasterio de San Pedro de Vilanova, en Dozón, finalicen entre mes y el de noviembre. Dentro de ese mismo plazo se incluye un nuevo proyecto, ya autorizado, para actuar en el retablo mayor y que completarán una inversión de la Xunta que alcanza cerca de los 279.000 euros. Al proyecto del retablo se destinan 17.250 euros. El plazo de ejecución que se fijó para estos trabajos fue de dos meses y medio. Al resto de las actuaciones de restauración, la Xunta destino 261.360 euros.
Paralelamente el Concello de Dozón, dentro de sus planes de promoción turística del municipio, incluye actuaciones en el entorno del mosteiro a fin de dotar la zona de un mayor atractivo e incentivar las visitas. Para ello se busca también una fórmula que posibilite a los visitantes el acceso a la iglesia. En estos momentos son unos vecinos los que cuentan con las llaves y facilitan la entrada, llegado el caso, a los visitantes.
Se estudia la forma de poder contar con una atención más permanente y buscar una forma de financiación que permita contar incluso con un guía. Por parte de l Concello de Dozón se solicitó también a la Xunta la instalación de una iluminación exterior para el monumento tras su restauración.
Los trabajos van avanzando a buen ritmo. En agosto, cuanto se produjo una visita del conselleiro de Cultura, Roman Rodríguez, ya se habían finalizado las intervenciones en las fachadas exteriores del edificio con la limpieza de las piezas de cantería históricas, la eliminación de la vegetación, el picado de juntas, actuaciones de consolidación de los muros, la limpieza y restauración de los pórticos, además de otros elementos de piedra escultóricos y el tratamiento y pintado de la carpintería de madera.
A estas obras se añadieron las realizadas en las cubiertas con la cubrición de los tejados con teja cerámica curva igual que la existente y la instalación de una nueva cubierta de teja curva ventilada.
Tras estos, las obras prosiguieron con las de pavimentación de la zona exterior con acabados pétreos y el acondicionamiento de los muros exteriores del atrio con su limpieza, rejuntado y reconstrucción del muro de mampostería así como la colocación y pintado de la verja. Unos trabajos que se completan con la canalización de las aguas de lluvia y los drenajes correspondientes.
Las obras del retablo mayor se desarrollarán a la vez que los del edificio. Incluye la aplicación de un tratamiento de conservación del retablo mayor y del frente del altar de la iglesia del monasterio a fin de recuperar su estabilidad.
El monasterio de San Pedro de Vilanova se encuentra al lado de un camino empedrado. Es un ejemplo del Románico tardío y cuenta con una planta sencilla de una sola nave que finaliza en un ábside semicircular.
En 1154, la señora feudal Guntroda Suárez donó los terrenos para la construcción del monasterio y lo dotó de propiedades para su subsistencia siguiendo una practica común en la época en la que las grandes señoras, una vez viudas se retiraban a los cenobios fundados por ellas mismas. El monasterio, de monjas benedictinas fue independiente hasta 1499 y en esa fecha pasó a depender del compostelano San Payo de Antealtares a donde se acabaron trasladando las monjas, quedando la iglesia. El monasterio se perdió tras su abandono con la Desamortización del siglo XIX.