Los peregrinos se decantan por rutas alternativas a la ruta francesa, y llegan desde más países
03 nov 2021 . Actualizado a las 22:42 h.Xa choveu desde aquel Xacobeo del 2004. Marcado por los grandes conciertos y eventos culturales, fue el primero sin el Pelegrín. De las chapas y llaveros de la mascota se ha pasado a los stickers de la Cunchiña, que ya nació en formato digital. El Santo de los croques ya no se puede tocar, pero el Pórtico de la Gloria ha recuperado sus colores. Las cosas han cambiado mucho desde aquella actuación de los Red Hot Chilli Peppers en Monte do Gozo. Pero, si algo se mantiene impasible al paso del tiempo es el Camino de Santiago. ¿O no? Los datos oficiales revelan que las preferencias de los peregrinos han cambiado. La ruta francesa ha perdido fuerza frente a itinerarios alternativos como el Inglés, que sube como la espuma del mar que lo baña.
Para ser justos, el Camino Francés sigue siendo el rey indiscutible de los itinerarios. Sin embargo, ha perdido fuelle frente a otras rutas. Si en el año 2004 tres de cada cuatro peregrinos optaban por este recorrido, en la actualidad supone poco más de la mitad de llegadas a Santiago. No es que el trazado que pasa por O Cebreiro haya perdido adeptos. Las últimas cifras anteriores a la pandemia, del 2019, son similares a las del Xacobeo del 2010. En ambos casos se rozaron las 190.000 Compostelas, muy por encima de las 136.000 que se entregaron en el 2004.
Lo que sucede es que el Camino ha ganado popularidad y, con ella, ha llegado la eclosión de otras rutas. Ya en el Xacobeo 2010, el itinerario francés suponía cerca de un 70% de las peregrinaciones. En aquel año, muchas personas optaron por desviarse hacia el Camino Portugués, que aumentó de un 8,8% al 12,6%, y el del Norte, que pasó de un 4% al 6,6%.
En el 2021, con el Camino Francés rozando un 55% de las Compostelas, los peregrinos han diversificado aún más su presencia por otras rutas. Aunque el Camino Portugués se mantiene segundo en popularidad, con un 19,1%, han cogido fuerzas alternativas como su variante por la costa (4,4%), el Inglés (6,1%) o el Primitivo (5,8%). Hasta la pasada década, estos itinerarios eran los menos utilizados y el de la costa ni siquiera constaba con categoría propia en las estadísticas oficiales.
Cada vez más costeros
Lo cierto es que las cifras de personas que optaban por el Camino Portugués de la Costa, el de Invierno y el de Fisterra eran tan pequeñas que no aparecen en los informes de la Oficina del Peregrino hasta mediados de la pasada década. Un dato que confirma el «boom» de las rutas xacobeas y la búsqueda de itinerarios menos saturados.
Esta tendencia se ha hecho notar, sobre todo, en el Camino Inglés. Pasó de ser la vía menos utilizada en el 2004 (1,72%) y el 2010 (2,4%) a ocupar el tercer puesto del ránking en el 2021. Algo similar ha ocurrido con la ruta Primitiva, que se sitúa un puesto por detrás de la inglesa, pasando de un 2,7% en el 2004 a un 5,8% en el año actual.
Pero, si el itinerario francés se mantiene en el podio, ¿qué rutas han perdido adeptos? La Vía de la Plata ha sido la mayor damnificada de esta tendencia hacia las zonas costeras. Pasó de suponer un 5,2% de las peregrinaciones en el 2004 a un 2,1% en la actualidad. Otros recorridos como el Camino del Norte mantienen unas cifras estables, en torno al 6%. El Portugués, por su parte, se mantiene en el segundo puesto sin dejar que crecer. Uno de cada cinco romeros optan por seguir su estela.
Evolución de cada camino:
La procedencia de los peregrinos
La popularidad de las rutas no es lo único que ha cambiado desde el 2004. La presencia de extranjeros en el Camino no ha dejado de crecer. Así lo confirman los últimos datos anteriores a la pandemia. En el 2019, más de la mitad de personas que llegaron a Santiago eran originarias de otros países. Aunque en los años jubilares suelen aumentar las peregrinaciones nacionales, las cifras distan mucho del 77% que suponían en el primer Xacobeo del mileno.
¿De dónde vienen los peregrinos extranjeros? La mayor parte proceden de países europeos, como Alemania, Francia o Italia, y latinoamericanos, como México, Venezuela o Brasil. Una tendencia que se mantiene desde el 2004. El mayor cambio es más bien anecdótico. La lista de países de origen ha aumentado. Laos, Eritrea o Papúa-Nueva Guinea son algunos ejemplos. Este 2021, sin ir más lejos, el peregrino que más distancia ha recorrido desde su casa vino desde Nueva Caledonia, una isla del Pacífico situada a más 17.500 kilómetros de Santiago.